Putin recibió a Prigozhin días después de la rebelión del grupo Wagner

Los comandantes de Wagner le dijeron a Putin que eran sus soldados y que seguirían luchando por él, según Peskov. Putin escuchó "las explicaciones de los comandantes" y les ofreció opciones de empleo después de la rebelión, según la versión del Kremlin.

"Los propios comandantes expusieron su versión de lo sucedido y destacaron que eran acérrimos partidarios y soldados del jefe de Estado y del comandante en jefe", agregó Peskov. Los dirigentes de Wagner "también dijeron que estaban dispuestos a seguir luchando por la patria".

El breve motín encabezado por Prigozhin, en el que los combatientes de Wagner tomaron el control de la ciudad sureña de Rostov, enfrentó a Putin al mayor desafío a su permanencia en el poder desde que asumió como líder supremo de Rusia el último día de 1999. Fue desactivado en un acuerdo negociado por el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko.

Prigozhin estaba destinado a irse a Bielorrusia, según los términos del acuerdo, pero Lukashenko dijo hace unos días que el líder del grupo Wagner estaba de regreso en Rusia y que los combatientes de Wagner aún no habían aceptado una oferta para trasladarse a Bielorrusia, lo que generó dudas sobre el cumplimiento del acuerdo.

Serguéi Surovikin sigue sin aparecer en público

La reunión introduce un elemento de confusión y un aroma a intrigas palaciegas en torno a las consecuencias de la rebelión fallida de los Wagner. La difusión de la noticia coincide con la reaparición pública de Valeri Guerásimov, el jefe del estado Mayor del ejército ruso. Guerásimov y el ministro de Defensa, Serguéi Shoigu, son enemigos declarados de Prigozhin, que exigía su destitución para detener su motín. Guerásimov llevaba sin ser visto en público desde la rebelión. Ahora, la televisión rusa muestra unas imágenes en las que el general escucha un informe sobre ataques ucranianos con misiles en Crimea.

El Ministerio de Defensa dijo que las imágenes mostraban a Guerásimov en una reunión el domingo día 9. El que sigue sin aparecer en público es el general Serguéi Surovikin, que fuera comandante en jefe de las tropas rusas en Ucrania durante unos meses. Surovikin, que en enero fue desplazado al número dos del escalafón de mando en Ucrania, es también comandante en jefe de las fuerzas aeroespaciales, y no ha sido visto desde que, al estallar el motín de Wagner, grabara un vídeo pidiendo a los soldados rusos que no apoyaran el levantamiento.

Surovikin, conocido como 'el general Armageddon' o 'el carnicero de Alepo' por su brutalidad en Siria o Chechenia, es tenido por afín a Prigozhin desde que coincidieron en la guerra de Siria en 2017. Fuentes de Inteligencia occidental citadas por el 'New York Times' le hacían conocedor de las intenciones de rebelarse de Prigozhin.

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