Rajoy asegura que Venezuela necesita "una solución pacífica y democrática"

El expresidente del Gobierno español Mariano Rajoy dijo en la capital ecuatoriana que Venezuela "necesita una solución pacífica y democrática" para su situación política y humanitaria, que pase por la celebración de comicios libres.

Rajoy, en una conferencia en la capital ecuatoriana, subrayó que la crisis en Venezuela requiere de "una solución que lleve a la reconciliación nacional y que tiene que desembocar en unas elecciones libres de acuerdo a los estándares internacionales", según indicó su jefa de prensa.

El expresidente del Ejecutivo español realiza una visita privada a Ecuador, donde se estrenó como ponente internacional en la inauguración del curso académico de la Universidad SEK de Quito, con una clase magistral titulada 'España y Ecuador. Una amistad sólida en un mundo en transformación'.

Respecto a la situación venezolana señaló que "es preciso recuperar la institucionalidad democrática con respeto a los derechos humanos y la liberación de todos los presos políticos", a la vez que consideró urgente poner en marcha medidas que atiendan las necesidades básicas de los venezolanos.

Sin mencionar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, Rajoy indicó que en el "panorama general de los gobiernos democráticos y de respeto a los derechos humanos destaca con sangrante dramatismo la situación de Venezuela". "Todos los miembros de la comunidad iberoamericana y demócratas del mundo" siguen con "honda preocupación" lo que sucede en ese país, dijo el expolítico conservador español, que subrayó que "a todos nos duele Venezuela".

Rajoy calificó el fenómeno como "una crisis humanitaria que trasciende su carácter nacional y está generando un enorme impacto en toda la región", al tiempo que responsabilizó de la "degradación progresiva del país" a la "ineficacia económica y la falta de democracia".

Destacó que pese a ese y otros casos aislados en la región, es "innegable el progreso general experimentado por América Latina en los últimos años", resultado de décadas de estabilidad política, del refuerzo de las instituciones democráticas y del estado de derecho.

Su intervención, en el interior del monasterio de la localidad de Guápulo, del distrito metropolitano de Quito y patrimonio mundial de la UNESCO, desgranó los estrechos vínculos que unen a España con América Latina así como los retos que afrontan las relaciones en un mundo cada vez más global y multilateral. "La pertenencia a la comunidad iberoamericana es uno de esos valores que debemos cultivar y proteger", dijo Rajoy, para quien ese bloque "constituye una hermandad histórica, cultural y afectiva que cotiza al alza en el mundo nacido de la globalización".

Asimismo recordó que España es el segundo país del mundo que más invierte en Iberoamérica y que un tercio del total de la inversión española en el exterior tiene como destino esta región. "Sea cual sea el signo de los gobiernos, España estará siempre al lado de Iberoamérica", señaló.