Rusia
Un recluta dispara contra un jefe de una oficina de reclutamiento en Rusia: "Ahora todos nos vamos a casa"
Ruslan Zinin, un joven de 25 años, disparó contra el comisario militar, Alexander Eliseev, quien se encuentra en estado crítico.
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Laguerra en Ucrania nos sigue dejando imágenes durísimas. Con la reciente movilización parcial de civiles al país invadido, se están viviendo momentos de verdadera tensión en la ciudadanía de Rusia. El último de ellos ha tenido lugar este mismo lunes, cuando un joven de 25 años ha disparado contra un comisario militar que quería reclutarle.
El comisario militar, en estado crítico
Los hechos han ocurrido en la oficina de alistamiento militar de Ust-Ilimsk. Ruslan Zinin, un hombre de 25 años, ha abierto fuego contra el jefe del centro de reclutamiento, Alexander Eliseev, dejándolo herido de gravedad. Según las primeras informaciones obtenidas de la investigación, Eliseev se encontraba instruyendo a los nuevos reclutas, entre los que estaba Zinin.
Tal y como aseguran los allí presentes, el joven, antes de empezar a apretar el gatillo, dijo al resto: "Ahora todos nos iremos a casa". Tras estas palabras, disparó contra el comisario militar y, tras animar a los otros reclutas a huir, le volvió a disparar.
El medio ruso 'Baza' asegura que Eliseev está en el hospital, mientras que los medios de Ust-Ilimsk, donde más de 300 ciudadanos están llamados a combatir, afirman que ha sido llevado del quirófano a cuidados intensivos, debido a la criticidad de su estado físico.
Los rusos claman contra la guerra
Esta información ha sido confirmada por el gobernador de la región de Irkutsk, Igor Kobzev, en su canal de Telegram. Kobzev ha añadido que el tirador "ha sido detenido de inmediato" y que "definitivamente será castigado". Asimismo, ha anunciado un refuerzo en las medidas de seguridad en las oficinas de alistamiento, donde se están sucediendo muchos actos vandálicos por todo el país.
La intención de movilizar a 300.000 reservistas ha hecho saltar las alarmas entre los rusos, cuyasprotestas en las calles son constantes. Muchos de ellos han tomado la decisión de abandonar el país, tanto por tierra como por aire, para así evitar la guerra. Otros buscan maneras de autolesionarse, como un hombre, en Riazán, que se prendió fuego, sufriendo heridas leves.
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