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LO CALIFICAN DE "TREMENDA PÉRDIDA"
Un rinoceronte mata a un científico que trabajaba en la conservación de este animal en Ruanda
El científico Krisztián Gyöngy, que tenía un "papel crucial en los esfuerzos para reintroducir los rinocerontes" en el Parque Nacional Akagera de Ruanda, ha fallecido mientras hacía trabajo de campo con los animales.
Un rinoceronte mató a un especialista húngaro en esta especie en el Parque Nacional Akagera de Ruanda mientras el científico hacía trabajo de campo con los animales, informaron las autoridades del parque.
El animal que acabó con la vida de Krisztián Gyöngy es uno de los 18 ejemplares de esta especie trasladados el mes pasado desde Sudáfrica para comenzar la repoblación del rinoceronte negro oriental, extinguido en Ruanda hace diez años. "Kris tenía un papel crucial en los esfuerzos para reintroducir los rinocerontes en el parque", explicó Peter Fearnhead, director ejecutivo de la autoridad de parques nacionales de Ruanda.
"Estaba haciendo trabajo de campo, entrenando a los guardas sobre cómo rastrear a los animales", añadió Fearnhead, que describió el fallecimiento como una pérdida "tremenda para todo el mundo y especialmente para la conservación del rinoceronte en África".
Los empleados del parque siguen trabajando para establecer los detalles exactos sobre cómo murió Gyöngy, que acababa de mudarse a Ruanda después de trabajar en proyectos de conservación en Malaui.
El científico húngaro lleva cinco años investigando en la conservación de rinocerontes y deja mujer y una hija. "Enviamos nuestras más profundas condolencias a la familia", dijo el director ejecutivo de la autoridad de parques de Ruanda.
Entre otras funciones, Gyöngy estaba a cargo de la formación de guardas en cómo ocuparse de los rinocerontes recientemente trasladados a la reserva.
El Parque Nacional de Akagera albergaba en la década de 1950 unos 50 rinocerontes negros. La población fue disminuyendo progresivamente a causa de la caza furtiva, y el último rinoceronte desapareció del parque en 2007. La reserva cuenta con un hábitat de sabana y ha experimentado importantes mejoras desde 2010.
El turismo es la principal fuente de divisas de Ruanda y el Gobierno ha redoblado sus esfuerzos por potenciar el sector con la repoblación de especies extinguidas como los rinocerontes negros o los leones blancos.
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