Scotland Yard evita que despegue un avión en el que viajaba una niña para unirse al Estado Islámico

Scotland Yard ha evitado el despegue de un avión de Londres que se dirigía a Siria y en el que iba a viajar una niña británica de 15 años para unirse a las filas yihadistas, según ha informado el diario londinense 'The Evening Standard'.

La niña, del barrio londinense de Tower Hamlets, reservó y compró a escondidas un billete de avión para Estambul, sin que lo supieran sus padres. Después de que la Policía evitara el despegue del avión, la niña ha regresado con su familia.

Fuentes de la Policía han dicho que el número de menores que han viajado al extranjero para unirse a las filas del Estado Islámico y otros grupos extremistas, aunque es pequeño, ha crecido bastante en los últimos meses.

Un miembro de Scotland Yard ha asegurado que "el avión ya estaba en la pista de despegue, pero hemos conseguido frenarlo". Según ha dicho, "ha sido una difícil decisión, pero debíamos tomarla". "Probablemente, hemos salvado la vida de la niña", ha añadido.

La investigación se centra en cómo la niña, que pertenece a una familia sin vínculos con grupos extremistas, pudo comprar el billete y embarcar en el avión. Fuentes antiterroristas aseguran que los medios de comunicación han podido dar una impresión falsa de la vida en Siria, que es especialmente "horrenda" para las mujeres que se han unido al conflicto desde el extranjero.

Scotland Yard se ha negado a dar más detalles del caso, pero ha confirmado la existencia de una "investigación de una persona perdida" y que ha resulto satisfactoriamente. Según un portavoz, "el sábado 6 de diciembre la Policía recibió informes de una niña de 15 años de Tower Hamlets  desaparecida". "Los agentes pudieron localizarla y devolverla a casa a salvo", ha dicho.

Cerca de 500 británicos se han unido a grupos yihadistas, lo que demuestra la simpatía que se ha despertado en Reino Unido por los extremistas islámicos. El Gobierno ha respondido lanzando nuevas medidas antiterroristas que permitirán al Ministerio del Interior prohibir a aquellos que viajen a Siria o a Irak regresar a Reino Unido durante hasta dos años.