Strauss-Kahn atribuye su escándalo a enemigos vinculados a Sarkozy

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SEGÚN EL DIARIO FRANCÉS 'LE MONDE'

Strauss-Kahn tendrá que pagar 4,6 millones a la trabajadora que le acusó de violación

Según avanza el diario francés 'Le Monde', el exdirector del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauss-Kahn habría llegado un acuerdo por el que debería pagar 4,6 millones de euros (seis millones de dólares) a la asistenta que le acusó de asalto sexual. Según fuentes del diario, Strauss no contaría de momento con esa cantidad, por lo que pediría un préstamo por valor de tres millones de dólares y los otros tres se los pediría a su mujer, de quien se separó hace unos meses.

El exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional Dominique Strauss-Kahn está dispuesto a entregar 4,6 millones de euros (seis millones de dólares) a Nafissatou Diallo, la asistenta que le acusó de asalto sexual durante su estancia en el hotel Sofitel de Nueva York en mayo de 2011, para cerrar la demanda civil interpuesta por la mujer, según el diario francés 'Le Monde', sin que los abogados de ambas partes hayan confirmado la información.

Strauss-Kahn y Diallo firmarán este acuerdo económico el próximo 7 de diciembre en la oficina del juez Douglas McKeon, según las fuentes del diario, que aseguran que el ex director gerente del FMI no cuenta de momento con esta cantidad y contempla pedir un préstamo bancario por valor de tres millones de dólares.

Los otros tres restantes se los pediría a su mujer, Anne Sinclair, de la que se separó hace unos meses.

El primer proceso judicial contra Strauss-Kahn terminó el pasado 23 de agosto de 2011 con la absolución del ex director gerente después de que la Fiscalía de Nueva York detectara profundas inconsistencias en el relato de los hechos por parte de Diallo.

A continuación, la mujer presentó una demanda por la vía civil por daños y perjuicios. El acuerdo tiene lugar tras un año de negociaciones entre los abogados de Strauss-Kahn y el equipo legal de Diallo, supervisadas por el propio juez McKeon bajo la premisa de que ninguna de las dos partes estaban dispuestas a exponerse en un nuevo juicio público.

Una vez firmado el acuerdo, la suma concreta no podrá darse a conocer al estar sujeta a una cláusula de confidencialidad, y la advertencia de que cualquier incumplimiento en la transacción podría derivar en el inicio de un nuevo procedimiento contra el ex director gerente del FMI.

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