Viajes de lujo

El submarino del Titanic... y otros viajes excéntricos para el turismo de lujo

La desaparición del submarino del Titanic, una experiencia muy arriesgada y cara, pone sobre la mesa este tipo de turismo solo apto para los bolsillos más desahogados. Repasamos algunos de estos viajes exclusivos y más seguros.

Turismo de lujo: los viajes más excéntricos para marcar la diferencia

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Llegar donde nadie ha llegado puede convertirse en una obsesión. Por ejemplo, descubrir los secretos del Titanic, hundido a 3.000 metros de profundidad en el océano Atlántico, prometía ser una experiencia inolvidable para los 5 ocupantes del submarino Titan, pero ese 'lujo' les ha costado 250.000 dólares y mucho más: la vida.

Este suceso hace reflexionar hasta dónde pueden llegar algunos ricos en un turismo de lujo que roza lo excéntrico.

Si las playas les parecen abarrotadas y disponen de 19.000 euros, la isla de Parrot Cay, que forma parte del archipiélago de Turcos y Caicos, se alquila por días. Y si la tierra no es suficiente, algunos hoteles ofrecen ya habitaciones bajo el agua. Pueden disfrutar de la flora y fauna marina desde la ventana de la habitación, eso sí, por 1.500 euros la noche.

Para los amantes de lo clásico, viajar en el Orient Express sigue siendo una opción a la orden del día. Pero solo para los que puedan invertir 3.500 euros por noche en este tren que conecta alguna de las capitales europeas.

Escalar el Everest no solo es de difícil acceso por ser el punto más alto de la Tierra, sino también porque cuesta más de 30.000 euros la licencia para subir. Aunque incluye también la equipación, el alojamiento (tiendas de campaña, nada muy lujoso), la comida y los guías. Algo más caro es llegar a la cima de la montaña en helicóptero, ahorras en tiempo, pero tendrás que desembolsar 135.000 euros para poder llegar.

Y desde luego la opción más inaccesible y la más parecida a la del submarino del Titanic: varias empresas ofrecen ya viajes al espacio. Por 450.000 euros podrán ver la Tierra desde más allá de la atmósfera.

Está claro que a partir de ahora, tras conocer que este tipo de 'privilegios' pueden poner en riesgo su vida, muchos se pensarán más si merece la pena embarcarse en una aventura así o al menos revisarán mejor las consecuencias de esta peculiar decisión.

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