Un juez canadiense ha ordenado a tres compañías de tabaco pagar 15.000 millones de dólares canadienses (unos 11.100 millones de euros) a fumadores de la provincia de Quebec. Las compañías Imperial Tobacco, Rothmans, Benson & Hedges y JTI-MacDonald tendrán que abonar esa cifra por daños físicos y morales, dijo el juez de la provincia de Quebec, Brian Riordan.
El juicio contra las tres tabaqueras se inició en 2012 después de que dos fumadores presentasen en 1998 de forma independiente sendas demandas contra el sector en nombre de unos dos millones de fumadores de Quebec.
En 2005, el Tribunal Supremo de Quebec ordenó unificar las dos demandas populares en un sólo caso lo que le convirtió en el mayor caso civil en la historia de Canadá. Según los demandantes, durante décadas las empresas ocultaron a los consumidores las consecuencias del tabaquismo y, pese a tener prueba científica sobre su toxicidad, sus campañas publicitarias restaron importancia a los efectos del tabaco.
Las tres compañías de tabaco anunciaron que apelarán la sentencia poco después de conocerse la decisión judicial. Una de las compañías, JTI-MacDonald, dijo en un comunicado que los canadienses han conocido desde hace décadas los peligros del tabaco, algo reforzado por "los avisos impresos desde hace más de 40 años en cada paquete de cigarrillos".