Semana Santa

Los talcigüines, los diablos protagonistas de la Semana Santa en El Salvador

Vestidos de rojo con capuchas y con un látigo de cuero, estos personajes van azotando a los habitantes de la localidad de Texistepeque para limpiarles los pecados y un hombre disfrazado de Jesús se enfrenta a ellos. En esta curiosa tradición se simboliza la lucha del bien contra el mal.

En la Semana Santa de El Salvador los diablos son los protagonistas. Al menos en la localidad de Texistepeque. Los talcigüines se enfrentan a Jesús azotan a todos los habitantes en una ceremonia que simboliza la lucha del bien contra el mal. Es una de las tradiciones más curiosas que se ven estas fechas.

El día comienza con una misa en la parroquia de San Esteban a la que asiste un hombre disfrazado de Jesús y los talcigüines, los protagonistas. Son 59 hombres vestidos de rojo y con capucha, su látigo de cuero atemoriza a los habitantes de Texistepeque, una localidad situada a 83 kilómetros al norte de la capital San Salvador. Una vez terminada la misa, los talcigüines salen a las calles de para castigar a las personas por sus pecados con latigazos.

El bien vence al mal

Mientras, el hombre vestido de Jesús porta una túnica morada y en sus manos lleva una cruz y una campana. Es el encargado de vencer a los talcigüines que están escondidos y se enfrentan a él. Cuando los diablos ven de cerca a Jesús golpean el suelo tres veces con su látigo. Luego, los talcigüines rodean a Jesús y golpean el suelo nueve veces con sus látigos para indicar la tentación.

Al final el bien puede al mal. Es decir, Jesús acaba con todos los talcigüines que se caen ante él. El evento finaliza con un momento culmen cuando Jesús regresa a la iglesia y los diablos forman una larga fila rindiéndose.

"Nosotros como talcigüines representamos el mal. Jesús, en cada rincón, representa el bien. Y el bien siempre triunfará sobre el mal", explica Mauricio López, uno de los 59 talcigüines. Como es originario de la localidad, vive la celebración con especial emoción: "Es una tradición muy hermosa, sobre todo porque es originaria de Texistepeque, y me siento muy orgulloso de representar a mi amado Texistepeque".

Muchos turistas de El Salvador se acercan a vivir de primera mano esta curiosa tradición, como Henry Díaz: "Es mi primera vez aquí, siempre quise venir. Creo que la situación que vive el país este año es la mejor para disfrutar de estas festividades. Por eso estamos aquí para aprender un poco más sobre ellas".

La ceremonia se celebra antes de Pascua y los cristianos representan que Jesús resucitó tras morir por sus pecados.