Taylor Swift, la pesadilla de los seguidores de Donald Trump

Taylor Swift no se ha pronunciado en ningún momento sobre las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024. Pero solo con pensar que la estrella de la música pop pueda apoyar al presidente Joe Biden, los conservadores entran en pánico.

Los insultos a Taylor Swift desde la derecha se han multiplicado en los últimos días, convirtiendo a uno de los iconos culturales más exitosos de Estados Unidos en un blanco en la primera línea de las ácidas guerras culturales y políticas del país.

Teorías conspirativas

 Taylor Swift rompió su silencio político en 2018, cuando apoyó al candidato demócrata al Senado por Tennessee. En 2020, respaldó a Biden para la presidencia y criticó a Trump en su documental 'Miss Americana'. Por eso, algunos conservadores han llegado a acusarla de ser un agente del gobierno que participa en una guerra psicológica.

Otros han difundido teorías conspirativas sobre su éxito musical y su relación con el jugador de fútbol americano Travis Kelce, de los Kansas City Chiefs. Según estos rumores, la NFL estaría manipulando los partidos para que los Chiefs ganen la Super Bowl y Swift pueda apoyar la reelección de Joe Biden desde el escenario.

"¿Quién creen que ganará la Super Bowl el próximo mes?", se preguntó el ex aspirante republicano a la presidencia Vivek Ramaswamy en X, antiguo Twitter.

La recaudación de Donald Trump cae

Según los datos publicados por el equipo de Trump, el expresidente solo logró recaudar 19 millones de dólares en el último trimestre de 2023, una cifra muy inferior a los casi 25 millones que obtuvo en el trimestre anterior y a los 33 millones que reportó la campaña de Joe Biden.

Su rival en el partido republicano, Nikki Haley, informó a principios de este mes que su campaña recaudó 24 millones de dólares, cinco más que la de Donald Trump en el mismo periodo. Tras las victorias en Iowa y New Hampshire, todo apunta a que Donald Trump volverá a ser el oponente de Joe Biden a las elecciones norteamericanas de 2024. Todo ello a pesar de cuatro casos penales pendientes este año, incluidos dos por sus esfuerzos por revertir su derrota en las elecciones presidenciales de 2020 y uno por su manejo de documentos clasificados al dejar el cargo.

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