La tecnología, clave en el rescate de los mineros

La tecnología ha marcado la diferencia entre este y otros rescates. Se han traído taladradoras desde Canadá, ingenieros norteamericanos han viajado desde Afganistán sólo para supervisar el proceso y hasta la NASA ha aportado sus programas alimentarios sicofísicos para mantener en forma a los mineros.

El cable de acero que les trae a la superficie ha sido importado desde Alemania y aguanta hasta 54 toneladas de peso. Además, se han construido tres cápsulas con ruedas, luz propia, amortiguadores y cuatro tanques de oxigeno.

Todo una alarde tecnológico que se completa con un arnés plagado de sensores que transmite a la superficie las constantes vitales de cada minero durante el viaje.