El último dato sobre el nivel de contaminación del agua subterránea en la central de Fukushima-1 es erróneo

Publicidad

CENTRAL DE FUKUSHIMA-1

TECPO se vuelve a equivocar en los datos proporcionados sobre los niveles de radiación

Las autoridades consideran "sumamente lamentable" que TEPCO se haya equivocado por segunda vez. TEPCO está revisando su análisis porque hizo mal algunos cálculos, que le llevaron a afirmar que la concentración de yodo radiactivo en el agua subterránea superaba 10.000 veces el límite legal.

El agua subterránea que hay en la central nuclear Fukushima-1, en el este de Japón, seguramente está contaminada con materiales radiactivos, pero el dato que dio este jueves la Compañía de Energía Eléctrica de Tokio (TEPCO, por sus siglas en inglés) es erróneo, según ha informado este viernes la Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial japonesa.

TEPCO, que gestiona la central, está revisando su análisis porque hizo mal algunos cálculos, que le llevaron a afirmar que la concentración de yodo radiactivo en el agua subterránea superaba 10.000 veces el límite legal, según informa la agencia de noticias Kiodo.

Hidehiko Nishiyama, un portavoz de la Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial, ha calificado de "sumamente lamentable" que TEPCO haya proporcionado por segunda vez datos erróneos sobre los niveles de radiación en Fukushima-1, dañada por el terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo.

Hace unos días, la compañía corrigió su análisis sobre los niveles de radiación en el agua acumulada en el sótano del edificio que alberga la turbina del reactor número 2.

"TEPCO se enfrenta a una situación grave y no está cumpliendo las expectativas de la gente, que está muy preocupada. Sus datos deberían ser fiables", ha declarado Nishiyama. La Agencia ha llamado la atención a esta empresa y le ha instado a que tome medidas para que no vuelva a ocurrir.

La Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial ha dicho que los datos sobre las sustancias radiactivas presentes en las muestras de agua subterránea tomadas el martes y el miércoles junto al edificio donde está la turbina del reactor número 1 posiblemente serán revisados a la baja.

Esto se debe a que los programas de evaluación de TEPCO para materiales como el telurio, el molibdeno y el circonio incurrieron en errores, aunque los análisis del yodo radiactivo son correctos.

CONTINUAN LOS TRABAJOS
Este viernes, los trabajadores han continuado las operaciones para habilitar un espacio suficiente en los tanques para almacenar el agua contaminada que se había acumulado en los sótanos de los edificios de los reactores y en las zanjas subterráneas conectadas a ellos.

TEPCO ha estado echando ingentes cantidades de agua en los reactores y en las piscinas donde se guardan las barras de combustible gastadas como medida provisional para refrigerarlos, porque si las barras se recalientan y sufren daños, existe el riesgo de que liberen una gran cantidad de materiales radiactivos que contaminarían el medio ambiente.

Sin embargo, se cree que esta medida está relacionada con la posible fuga de agua contaminada por la radiación. El agua provendría de los reactores, donde las barras de combustible se han fundido parcialmente.

Por otro lado, TEPCO comenzará a aplicar este viernes una resina soluble en agua con el fin de impedir que el viento y la lluvia dispersen el polvo radiactivo procedente de la central nuclear. Asimismo, los ingenieros empezarán a llevar agua en una barcaza de la Marina de Estados Unidos a la planta para inyectara en los reactores y así enfriarlos.

SEGURIDAD DE LOS TRABAJADORES
La Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial también ha dicho este viernes que ha dado otro aviso a TEPCO porque se ha descubierto que no todos los operarios que están trabajando en Fukushima-1 tenían dosímetros para medir hasta qué punto se habían expuesto a la radiación.

Algunos operarios estaban compartiendo sus dosímetros porque muchos de estos aparatos fueron destruidos por el terremoto y el tsunami, una situación "no deseable desde el punto de vista de garantizar la seguridad de los trabajadores", ha señalado Nishiyama.

No obstante, ahora TEPCO ya dispone de 420 dosímetros, suficientes para todos. Nishiyama ha dicho que "a partir de hoy todos los trabajadores llevarán dosímetros, y si hay uno no puede conseguirlo, no se realizará la tarea".

El pasado 24 de marzo, tres operarios tuvieron que ser hospitalizados por haber estado expuestos a altos niveles de radiación. Según la Agencia, hasta ahora un total de 21 trabajadores han recibido una cantidad de radiación superior a los 100 millisieverts.

En una situación de emergencia, se permite que los trabajadores reciban hasta 100 millisieverts, pero el límite se ha elevado hasta los 250 millisieverts específicamente para la situación generada por el desastre en Fukushima-1.

Publicidad