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GRAVES DESTROZOS

Tres muertos en las inundaciones de Bélgica

Una persona permanece desaparecida por culpa de las fuertes lluvias que han colapsado el país por unas horas.

Tres personas muertas y una desaparecida es el nuevo balance de las inundaciones causadas por las fuertes lluvias que han caído en Bélgica en los últimos días, según anunciaron las autoridades. 

El tráfico de trenes de alta velocidad de Bruselas hacia París y Londres ha sido restablecido, después de varias horas de suspensión ante el temor de que cediera un dique del canal Bruselas-Charleroi

Dos de las víctimas mortales perecieron ahogadas en la noche del sábado en la pequeña localidad de Beaumont, al sur del país, junto a la frontera francesa. Una mujer de 72 años murió cuando el automóvil en el que viajaba fue arrastrado por la corriente hasta un callejón donde fue sumergido por las aguas. 

La otra víctima falleció al ser arrastrada por las aguas cuando se dirigía a pie a su vivienda. Una tercera persona murió, mientras los grupos de rescate buscan a un desaparecido, en el pequeño pueblo de Deux-Acren (oeste), parte del cual quedó inundado por la crecida del río Dendre. 

En Leeuw-Sint-Pieters, en las afueras de Bruselas, las autoridades evacuaron de urgencia más de doscientas viviendas tras la ruptura parcial de un dique del canal de navegación fluvial que une la capital con la ciudad sureña de Charleroi.

Las autoridades tuvieron que hacer un llamamiento a curiosos y periodistas presentes para que abandonaran la zona, según informó la agencia Belga. 

La amenaza de ruptura del mismo canal unos pocos kilómetros más al sur, en Halle, hizo que se suspendiera el tránsito de trenes por la vía de alta velocidad. Tras varias horas de examen de la zona, el tráfico se reanudó finalmente pero los trenes deben circular un tramo de cinco kilómetros a una velocidad de 20 kilómetros por hora. 

Además, trece espeleólogos holandeses fueron rescatados ilesos a última hora de la tarde del sábado tras quedar bloqueados en la profundidad de una grieta cerca de Lustin (sureste) debido a la subida del nivel de las aguas.

La mayoría de las provincias del país estuvieron entre el sábado y el domingo en alerta total o parcial ante los desbordamientos de muchos ríos por las continuadas precipitaciones de la última semana. 

El Ministerio de Defensa informó de que ha movilizado a un centenar de militares para ayudar a las autoridades de las localidades más afectadas, donde ha enviado además miles de sacos de arena, grupos electrógenos, canoas y equipos de bombeo. El Instituto Meteorológico Real ha bajado su alerta de roja a naranja para la mayor parte del territorio belga.

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