El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que está "cargado y listo" para responder al ataque contra refinerías saudíes y dijo que está esperando la respuesta de Riad para saber cómo proceder.
"El suministro de petróleo de Arabia Saudí fue atacado. Hay razones para pensar que sabemos el culpable, estamos cargados y listos, pendientes de verificación, pero estamos esperando a oír del reino sobre quién creen que fue la causa de este ataque, ¡y bajo qué términos procederíamos!", manifestó Trump en Twitter.
Los servicios de Inteligencia de EEUU aseguran que Irán está detrás de los ataques a las refinerías saudíes del pasado sábado, indicaron medios estadounidenses que citan a funcionarios no identificados.
Irán lanzó casi una docena de misiles de crucero y más de 20 aviones no tripulados desde su territorio en el ataque, dijo a ABC News un alto funcionario de la administración Trump.
"Fue Irán. Los hutíes están reclamando crédito por algo que no hicieron", dijo ese mismo funcionario sobre los rebeldes yemeníes que se han atribuido la autoría de los ataques.
El Gobierno ha publicado fotografías de satélite que muestran lo que los funcionarios dicen que son al menos 17 puntos de impacto en varias instalaciones saudíes por ataques que dijeron que procedían del norte o noroeste.
El sábado, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, ya responsabilizó de los ataques directamente a la República Islámica y aseguró que no hay "evidencias" que sugieran que procedían de Yemen, lo que fue negado por las autoridades iraníes, según las cuales Washington busca una excusa para tomar represalias.
Ese día dos refinerías de la petrolera estatal Aramco, clave para el abastecimiento mundial de crudo, fueron atacadas con diez drones, causando una reducción de cerca del 50 % de su producción.
Las autoridades saudíes están investigando el ataque y todavía no han señalado a un culpable; mientras que el Gobierno iraní ha negado negó cualquier implicación en los ataques.
Este domingo, el barril de crudo Brent se negoció a 70,98 dólares por barriles en los mercados a futuro de Nueva York un aumento del 18% con respecto al cierre del viernes, cuando era de 60,15 dólares.
Justo en el momento en que se daba a conocer ese aumento, Trump anunció que había autorizado la liberación de reservas de petróleo del país para que, si es necesario, garanticen el suministro mundial, impactado por los recientes ataques contra refinerías saudíes.
Actualmente, Estados Unidos tiene guardados 630 millones de barriles de petróleo para casos de emergencia en unas enormes cavernas subterráneas en la costa del Golfo de México. El objetivo de esa reserva, creada tras la crisis del petróleo de 1973, es evitar que una hipotética falta de crudo desemboque en una dramática escalada de precios y consecuencias nefastas para la economía estadounidense.