El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantiene "una buena salud general" según el informe médico detallado que la Casa Blanca ha hecho público este jueves y que como novedad incrementa la dosis de un medicamento para reducir su colesterol, presente en altos niveles de acuerdo con sus análisis.
Este documento contiene la segunda parte de los resultados publicados el pasado 8 de febrero, cuando Trump se sometió a una revisión de cuatro horas supervisada por el médico de la Casa Blanca, Sean Conley y otros once especialistas.
El único cambio, aclara Conley, es el aumento de la dosis de Rosuvastatin hasta 40 miligramos diarios, un medicamento destinado a reducir los niveles de colesterol del tipo LDL, popularmente conocido como "colesterol malo" porque se acumula en las arterias y las obstruye. Y es que el análisis reveló que Trump posee un nivel de 122 miligramos por decilitro (mg/dL) del colesterol LDL, mientras que el considerado saludable para los hombres adultos no debe sobrepasar los 100 mg/dL.
"Estoy feliz de anunciar que el presidente de Estados Unidos tiene muy buena salud, y de anticipar que seguirá así por el resto de su Presidencia, y más allá", dijo en un comunicado Conley. Conley detalló que el presidente, de 72 años, no se sometió a ningún procedimiento que requiriese sedación o anestesia.
La revisión del año pasado indicó que Trump gozaba de una salud "excelente" aunque tenía sobrepeso y rozaba la categoría de obeso, con un índice de masa corporal de 29,9, dado que pesaba 108,4 kilos y medía 1,92 metros.
El entonces médico presidencial, Ronny Jackson, que también supervisó la salud del exmandatario Barack Obama desde 2013 (2009-2017), dijo que desarrollaría un plan de dieta y ejercicio para que Trump perdiese peso.