"¡Irán nunca tendrá un arma nuclear!", escribió este lunes Donald Trump en su cuenta de Twitter. El presidente publicó ese mensaje después de que en las últimas horas utilizara la misma red social para amenazar con atacar sitios culturales de Irán e imponer "grandes sanciones" a Irak.
"Ellos, los iraníes, pueden matar a nuestra gente. Pueden torturar y mutilar a nuestra gente. Pueden usar bombas en las carreteras para hacer volar por los aires a nuestra gente. Y nosotros no podemos tocar sus lugares culturales. No funciona así", afirmó el mandatario.
Tras pasar las vacaciones navideñas en Florida, el mandatario volvió a la Casa Blanca, en medio de las reacciones a la operación militar de EE.UU. del viernes pasado contra un convoy cerca del aeropuerto de Bagdad, que acabó con la muerte del comandante de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución de Irán, Soleimaní.
La muerte del que fuera considerado un héroe en Irán ha generado un continuo y creciente intercambio de amenazas entre Washington y Teherán, que ya ha avisado de que habrá "venganza".
Ante esta advertencia, el Gobierno de EE.UU. ha comenzado a enviar a Oriente Medio a 3.500 soldados y ha aumentado sus niveles de alerta en ciberseguridad.
La maniobra de Trump llega en medio del 'impeachment'
A nivel interno, varios miembros de la oposición demócrata han especulado sobre la posibilidad de que Trump haya ordenado la muerte de Soleimaní para desviar la atención del proceso de juicio político 'impeachment' al que está siendo sometido en el Congreso por sus presiones a Ucrania.
En opinión de los demócratas, Trump ha provocado a Irán con el objetivo de aumentar su popularidad de cara a las elecciones de 2020, ya que en EE.UU. las tasas de aprobación de los presidentes suelen subir en tiempos de guerra, cuando el país se une para hacer frente a una amenaza externa.
Hace años, Trump llegó a insinuar que Obama estaba valorando bombardear a Irán con el único propósito de ser reelegido en 2012. Obama nunca bombardeo a Irán, pero sí acabo con la vida del jefe de la red Al Qaeda, Osama bin Laden, lo que le granjeó un aumento de popularidad.