El líder de la izquierdista Syriza, Alexis Tsipras, afirmó tras depositar su voto en Atenas que el pueblo griego "va a recobrar la dignidad". En unas declaraciones, Tsipras, a quien las encuestas dan como claro favorito en las elecciones, con entre un 30 y un 36 por ciento de los votos según las últimas encuestas, advirtió a la Unión Europea (UE) que el futuro de Europa "no está en la austeridad, sino en la dignidad y la cohesión". "Hoy el pueblo heleno va a dar el último paso para recobrar su dignidad, para vivir un futuro con solidaridad", dijo Tsipras al salir del colegio electoral.
Algo más madrugador, el primer ministro griego en funciones, Andonis Samarás, se mostró confiado de la victoria de su partido, la conservadora Nueva Democracia. "En estas elecciones hay un gran número de personas que todavía están indecisas. Ellas determinarán el resultado", dijo Samarás al depositar su voto en un colegio electoral de la pequeña localidad de Pilos, en el sur del Peloponeso. El líder conservador dijo afrontar los comicios "con optimismo", porque "nadie va a arriesgar la trayectoria europea de nuestro país". Con ello aludió a su principal rival, Tsipras, a quien ha acusado de querer llevar a Grecia fuera del euro. "Estas elecciones son cruciales para nuestro futuro y el futuro de nuestros hijos. Hoy decidimos si seguir adelante con fuerza, con seguridad, con confianza, o si nos embarcamos en aventuras", concluyó.
Entre los otros candidatos, el líder de los socialistas griegos del PASOK, Evángelos Venizelos, manifestó al ejercer su derecho electoral que esperaba que el pueblo griego vote "por las generaciones futuras". Venizelos, vicepresidente del Gobierno y actual ministro de Exteriores, declaró en su colegio electoral de Salónica que "esperaba que el pueblo heleno votara por lo mejor y no por lo peor". "Deseo que hoy el pueblo heleno vote para lo mejor y no para lo peor, para ahora y para las generaciones futuras", dijo tras depositar su papeleta.
El PASOK, que podría conseguir entre el 4 y el 6 por ciento de los votos según las últimas encuestas, todavía aspira a lograr la tercera posición, en pugna con los neonazis de Amanecer Dorado y con el centrista To Potami (El Río). El voto socialista en estas elecciones puede quedar dividido también por el nacimiento de otra fuerza dirigida por el antiguo primer ministro, el socialista Yorgos Papandreu, que pugna por conseguir el 3 por ciento y entrar en el Parlamento.