Invasión rusa de Ucrania
Ucrania lucha contra el "terror energético" de Rusia e instala miles de puntos de calefacción en zonas clave
El Gobierno de Ucrania anuncia la instalación de miles de puntos de calefacción en zonas estratégicas, ante los intentos de Rusia de destruir todas las infraestructuras energéticas del país.
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En plena llegada del frío, y con el miedo a quedarse sin energía para afrontar las duras condiciones climáticas de este invierno, Ucrania anuncia que tiene en mente un plan para poder combatir el "terror energético" que promueve Rusia. Ese plan consiste en la instalación de puntos de calefacción en las llamadas 'zonas estratégicas' que Rusia ataca ferozmente, con la única intención de diezmar los elementos más básicos de la población ucraniana.
Desde hace semanas, Rusia emplea drones kamikazes para destruir toda infraestructura energética en Ucrania, un país que aporta electricidad a gran parte del continente, y que llegó a ser una zona clave en la defenestrada Unión Soviética. Un ejemplo de ello era la central nuclear de Chernóbil, que daba la mayor parte del suministro eléctrico a Kiev, y aportaba una gran cantidad de energía a diferentes zonas de la Unión Soviética.
Por ese motivo, y con el objetivo de impedir que Rusia se salga con la suya, Ucrania pretende llevar a cabo la instalación de estos puntos de calefacción, que pueden ser considerados como un generador de energía para abastecer a las zonas afectadas en caso de que sus infraestructuras sean destruidas. Ucrania ya ha solicitado mano dura contra Irán por su participación indirecta en la guerra con el suministro de drones kamikazes a Rusia, que ha contado con el rechazo de la mayor parte de la comunidad internacional.
Continúa la evacuación de Jersón
Mientras la otra guerra (la energética) se libra con más dudas que certezas, Ucrania y Rusia también tienen puesta la mirada en el terreno para saber cómo afrontar la situación militar que les espera en los próximos días. Una de las regiones clave es Jersón, anexionada ilegalmente por Rusia el pasado 30 de septiembre, junto a Donetsk, Lugansk y Zaporiyia. La población civil está siendo evacuada ante lo que se espera como una batalla de grandes dimensiones.
Ucrania prosigue sus avances en las regiones anexionadas y, pese a las amenazas de Vladímir Putin, no se detiene ante nada. En Jersón, se espera una dura batalla entre las Fuerzas Armadas de Ucrania y Rusia, que podría llegar a suponer un punto de inflexión en la guerra. Aunque los ejércitos todavía están preparándose para la contienda, ya hay previsiones de un enfrentamiento muy intenso entre ambos países, por lo que la comunidad internacional permanece muy atenta a las últimas novedades, que pueden ser decisivas en un hipotético desenlace del conflicto.
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