Los últimos momentos del yate 'Bayesian': "La tortura duró 16 minutos"

El hundimiento del 'Bayesian' no tuvo lugar únicamente por una borrasca. El capitán y su tripulación protagonizaron una serie de errores que están siendo investigados por la fiscalía de Termini Imerese.

Los nuevos indicios apuntan a que la embarcación, que se hundió unos 50 metros y que se quedó inclinada a estribor, se hundió verticalmente por la proa, lugar en el que estaban los camarotes de la tripulación.

Los pasajeros a bordo trataron de buscar aire antes de hundirse frente al puerto de Porticello, localizado a pocos kilómetros de Palermo. Sin embargo, una gran cantidad de agua irrumpió por la puerta abierta de la proa, atrapando a los pasajeros y hundiendo rápidamente al yate.

Según declaraciones dadas al Financial Times por Giovanni Costantino, constructor del lujoso yate y director ejecutivo de The Italian Sea Group, la embarcación era "insumergible".

"La tortura duró 16 minutos (...) No se produjo en un minuto, como han dicho algunos, sino en 16 minutos. Lo pueden ver en los gráficos, en el gráfico de seguimiento del AIS", aseguró Costantino.

Entre los principales factores que influyeron en el hundimiento del 'Bayesian', destacan:

• La orza móvil en posición elevada, que podría haber influido en la menor estabilidad del velero.
• Una escotilla de la cubierta superior estaba abierta.
• Los motores estaban apagados.
• Tuvo lugar un retraso en la activación del sistema automático, que se encarga de asegurar al barco en caso de peligro.
• No esperaban la tormenta, aunque en las horas previas fue anunciada con un aviso meteorológico.

Cronológicamente, esto fueron los sucesos que tuvieron lugar antes del hundimiento:

El ancla cedió

Los fuertes vientos amenazaban a la embarcación, haciendo que, a pesar de estar anclada, se moviese de forma brusca en todas las direcciones posibles.

Finalmente, el ancla cedió y se desprendió, dejando al velero libre y expuesto al temporal.

Comienza a entrar agua

La tormenta pasa a controlar por completo al 'Bayesian', cuyo interior comienza a llenarse de agua.

Después de que el agua llegase a la zona del generador o a la sala de máquinas, el yate se quedó sin luz.

Rumbo a la deriva

Al estar sin control, a la completa merced de la borrasca, el superyate cambió en varias ocasiones de rumbo y, después de recorrer unos 358 metros a la deriva, terminó hundiéndose.

Recuperan el último cuerpo

Los equipos recuperaron el cuerpo de la última persona desparecida en el naufragio: Hannah Lynch, joven de 18 años e hija del empresario Mike Lynch.

Pasados cuatro días de duras búsquedas, protagonizadas por la dificultad de bucear los 50 metros de profundidad y no poder estar sumergidos más de 12 minutos sumergidos, los buzos lograron encontrar a Hannah.

La joven fue localizada, al igual que las demás víctimas, fuera de los camarotes, lo que ha hecho pensar que las seis víctimas intentaron salir del velero mientras se hundía.

Siete víctimas y 15 rescates

El pasado lunes se produjo el naufragio del yate de lujo 'Bayesian' en las costas de Sicilia, que dejó un total de siete víctimas mortales, entre las que destacan el magnate británico Mike Lynch, su hija Hannah, de 18 años, el presidente de Morgan Stanley, Jonathan Bloomer, su esposa Judy y el socio del bufete de abogados Clifford Chance, Chris Morvillo, junto a su esposa Neda.

La Guardia Costera italiana actuó de forma muy rápida y efectiva, logrando rescatar a 15 pasajeros, entre los que se incluye un niño de menos de un año. Algunos de los supervivientes eran ciudadanos ingleses, mientras que también destacaban un ciudadano irlandés, un neozelandés y uno de Sri Lanka.

Actualmente, la fiscalía está investigando el naufragio por los delitos de homicidio múltiple y naufragio por negligencia. Además, todavía no tiene sospechosos, aunque las miradas se centran en el capitán James Cutfield, de 51 años.

La fiscalía apunta a que tuvieron lugar una serie de errores que derivaron en el hundimiento del velero. Una de las hipótesis barajadas inicialmente fue la rotura del mástil, que medía 75 metros, pero las operaciones de rescate habrían demostrado que en realidad está intacto.

Otra es que el barco se llegó a inclinar tanto que el agua entró con fuerza debido a que las escotillas y las compuertas laterales estaban abiertas, a pesar de los avisos de que se acercaba una tormenta.

El hundimiento

En medio de una fuerte borrasca, el capitán del yate aseguró que no vio venir el tornado. Esta confesión, respaldada por uno de los supervivientes, no termina de despejar las incógnitas que rodean al naufragio, ya que se desconoce el motivo por el que 'Bayesian' fue la única embarcación afectada cuando a pocos metros de él había otro velero.

La embarcación, que estuvo a merced del temporal con vientos de 150 km/h durante más de 350 metros, enfrentó su momento más crítico a las 3:50 horas de la madrugada. Finalmente, pasados los 16 minutos, se hundió.

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