El veto a derivados del petróleo ruso vaticina un posible subidón del diésel hasta los 2,2 euros

Este lunes 6 de febrero es el primer día que Europa no va a importar productos derivados del petróleo ruso acordado en el plan de sanciones contra Moscú. La medida afectará a la gasolina, pero sobre todo al diésel. Es muy probable que en las próxima semanas suba el precio de los carburantes. Desde el comienzo de año se incrementaron un 15%. El litro de diésel podría llegar a los 2,2 euros en España.

La importación de petróleo ruso por barco lleva prohibida en la Unión Europea desde principios de diciembre. Pero el veto no afectaba al crudo ruso importado por oleoductos. A partir de ahora, se abre un escenario incierto. El 44% de las importaciones de combustible de la Unión Europea dependen de Rusia.

El diésel puede verse afectado

Uno de los derivados del petróleo sobre el que más va a repercutir el veto es el diésel. Europa dejará de comprar a Rusia el equivalente de 14.000 piscinas olímpicas de diésel al año.

La Unión Europea es muy dependiente de este combustible, que alimenta al 42% de los coches y a más del 90% de los camiones y furgonetas comerciales en el Viejo Continente. Estados Unidos no consume tanto diésel como en Europa. "Se ha promovido la venta de vehículos diésel mediante una fiscalidad menor del gasóleo que de la gasolina", recuerdan desde la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP).

Ante la alta demanda de diésel y la retirada de Rusia las refinerías europeas están al máximo de su capacidad, no van a poder abastecer únicamente el mercado interno.

Este veto se produce en un momento en que hay escasez de diésel. Además la complejidad de este carburante hace que no todas las refinerías estén diseñadas para obtenerlo.

¿Hay alternativas?

La única alternativa es la compra de gasóleo a otros países. Pero en esa búsqueda de proveedores existe el peligro de recurrir a países que sí compren petróleo a Rusia. "Si China, India o Turquía le compran el petróleo a Rusia y luego se lo venden a la Unión Europea más caro, con su margen respectivo, nos estamos autoengañando y perdiendo dinero", sentencia la AOP.

España va a ser el país menos afectado de la Unión Europea. Desde mayo no recurre al petróleo ruso, cuenta con una amplia cartera de suministradores para nutrir a sus seis refinerías. En noviembre se importó crudo de 17 países diferentes, siendo los mayores exportadores México, Irak, Azerbaiyán, Kazajistán, Libia, Arabia Saudí y Estados Unidos.

"Los precios podrían llegar hasta los 2,5 euros por litro de diésel en Europa y 2,2 euros en España", vaticina la AOP. Y añade que es probable que se produzca un "efecto reflejo" en el precio de la gasolina, que acabará también por subir. De este modo se superarían los máximos registrados en verano, cuando el litro de diésel llegó a costar 2,1 euros.

A partir de febrero coger el coche va a ser todo un lujo.

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