La viuda de Payá espera que Carromero no tenga que cumplir la condena en Cuba

Ángel Carromero, un dirigente de Nuevas Generaciones del Partido Popular en Madrid, fue juzgado el pasado 5 de octubre en la ciudad oriental cubana de Bayamo y el Tribunal le declaró responsable de "homicidio" como conductor del automóvil que sufrió un accidente en una carretera cercana a esa localidad.

En el vehículo viajaban los cubanos Oswaldo Payá, de 60 años y líder del opositor Movimiento Cristiano Liberación (MCL), y Harold Cepero, también de ese grupo, que fallecieron a consecuencia del impacto contra un árbol.

La sentencia de la Sala Primera de lo Penal del Tribunal Provincial de Granma rebajó de siete a cuatro años la pena que solicitó la Fiscalía cubana. La viuda de Payá ratificó hoy que ella no considera a Carromero culpable del accidente porque, agregó, "siempre dijimos que lo exoneramos de los cargos imputados en su contra por la versión oficial de los hechos que no aceptamos y con la cual no estamos de acuerdo".

La familia de Payá no presentó cargos contra el español porque le considera inocente, ha cuestionado el proceso seguido sobre el caso así como la versión oficial del accidente de tráfico y reclama una investigación independiente.

Los hijos del fallecido opositor intentaron asistir al juicio pero las autoridades cubanas se lo impidieron y permanecieron varias horas detrás del cordón policial que restringía el acceso a la zona del tribunal.

"Lamento que cumpla ni uno ni cuatro, porque para mi no tenía que cumplir ninguno", remarcó Acevedo. "Y repito que ojalá algún día conozcamos la verdad de lo sucedido en el accidente, por el hecho de que Harold y Oswaldo merecen que se conozca y porque creo que esa es la base de la justicia, la reconciliación y la paz", añadió.

La nota sobre la sentencia, divulgada por medios oficiales de la isla, indica que la decisión judicial podrá ser impugnada tanto por el acusado como el fiscal mediante recurso de casación ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo Popular.

Unos días después del juicio contra Carromero, en declaraciones en Madrid, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, dijo que cuando se conociera la sentencia correspondería entonces "a los gobiernos hablar para que la repatriación sea lo más rápida posible".