El sanguinario grupo mexicano de sicarios y narcotraficantes Los Zetas, que desde 2008 siembra el terror en Guatemala, asesinó entre el viernes y el domingo pasados a 31 guatemaltecos, 26 de ellos decapitados, en dos acciones aparentemente aisladas, afirmaron hoy las autoridades.
El ministro guatemalteco del Interior, Carlos Menocal, aseveró este lunes a la prensa que esa "racha de barbarie sin precedentes" fue cometida por el grupo 'Zeta 200', una de las facciones del cartel de Los Zetas.
Veintisiete de las víctimas murieron el domingo en una finca, donde también el viernes se desencadenó un secuestro que terminó con el asesinato de tres familiares del propietario de las tierras, Otto Salguero, que ahora está en paradero desconocido. La cuenta macabra la completa la muerte, el sábado pasado, del hermano de un narcotraficante guatemalteco asesinado en 2008, dijo el ministro en declaraciones a los medios locales.
La matanza del domingo, según Menocal, la cometió un comando de entre 30 y 40 hombres del grupo 'Zeta 200' que llegó fuertemente armado a la finca 'Los Cocos', en el municipio de La Libertad del selvático departamento de Petén, fronterizo con México y Belice.
Los hombres iban en busca de Salguero y, al no encontrarlo, mataron a los 27 trabajadores, 26 de cuyos cuerpos fueron decapitados y esparcidos por el terreno, según el ministro del Interior. Las autoridades han iniciado una investigación para determinar el papel de Salguero en toda esta historia, que comenzó el pasado 10 de mayo cuando los delincuentes secuestraron a Luis Carlos Bardales Chacón, esposo de Keiri Eunice Franco, sobrina del propietario de 'Los Cocos'.
Según el ministro del Interior, la facción 'Zeta 200' asesinó el viernes pasado a Franco, a su suegro Luis Carlos Bardales Tobar -cuando iban a pagar un rescate de 450.000 quetzales (unos 59.200 dólares)- y también al secuestrado. Los tres cadáveres fueron hallados degollados en una carretera de Petén, aunque no se encontró rastro del dinero, de acuerdo con la versión oficial.
Unos desconocidos lanzaron hoy tres granadas e hirieron a un policía en Santa Elena, población cercana a 'Los Cocos', en lo que las autoridades consideran un intento de "dispersar" a las fuerzas de seguridad enviadas para investigar la matanza del domingo, calificada de "salvajada" por el presidente de Guatemala, Álvaro Colom. Menocal atribuyó al mismo grupo de sicarios el asesinato, el pasado sábado en la ciudad de Flores (Petén), de Haroldo León, hermano del narcotraficante guatemalteco Juan José León, alias 'Juancho León', quien operaba en el este del país.
'Juancho León' fue asesinado el 25 de marzo de 2008 junto con otras 10 personas por un comando de Los Zetas en el departamento oriental de Zacapa, en lo que fue la primera matanza perpetrada por el grupo de mexicanos en este país. El 30 de noviembre de ese año, en la aldea Agua Zarca, del departamento noroccidental de Huehuetenango, fronterizo con México, Los Zetas masacraron a otros 17 supuestos narcotraficantes guatemaltecos.
El 24 de abril de 2009 ejecutaron a cinco agentes de la División de Análisis e Información Antinarcótica (DAÍA) en un complejo de bodegas en un municipio del sur del país, en un aparente "tumbe" (robo) de drogas entre narcotraficantes. Los Zetas llagaron a Guatemala con el objetivo de hacerse con el control de las rutas del trasiego de drogas que estaban en poder de grupos locales, explicó hoy Menocal.
El grupo, uno de cuyos líderes, Daniel Pérez Rojas, alias el 'Cachetes', está detenidos en Guatemala, ha sentado su base de operaciones en el departamento norteño de Alta Verapaz, desde donde dirige y controla el paso de grandes cantidades de cocaína por los departamentos de Izabal, Zacapa, Escuintla, Chiquimula y Petén. Las autoridades no tienen estadísticas precisas de los asesinatos cometidos por este grupo criminal en Guatemala, pero aseguran que desde el 2008 han cometido al menos una decena de matanzas colectivas que sumarían un centenar de víctimas.