Los virus suelen perder efectividad con la llegada del buen tiempo y las altas temperaturas y circulan algunas teorías que aseguran que el brote del coronavirus podría frenarse a medida que nos vayamos aproximando al verano y el termómetro comience a subir.
De todas formas, los expertos no se ponen de acuerdo al 100% y recuerdan que "el virus no va a desaparecer".
"Todo apunta a que en los próximos 3 o 5 meses el virus se transmita menos, a finales de julio puede que tengamos brote controlado aunque no desaparezca " asegura el Doctor Benito Almirante del Hospital Vall d´Hebrón .
Hay quien sostiene que a 26º-27º de temperatura este virus no resiste. Sin embargo, estas teoría tiene detractores que argumentan que de ser así la COVID-19 no habría llegado a África ni a otros países que con verano austral, como Australia, o a clima tropicales, como es el caso de Filipinas donde precisamente se produjo el primer fallecido con coronavirus fuera de China.
La opinión de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha pronunciado al respecto y ha asegurado que "según las evidencias hasta ahora, el virus que causa la COVID-19 puede ser transmitido en todas las zonas, incluyendo las áreas con clima cálido y húmedo".
El director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS, Michael Ryan, ha declarado que "no se sabe cuál será su comportamiento en diferentes situaciones climáticas" y ha advertido que en estos momentos "es una falsa esperanza decir que el virus desaparecerá" cuando llegue el calor al hemisferio norte.