Más de 6.400 personas han ingresado en la UCI desde que empezó la crisis del coronavirus en España. Antes de la pandemia había cerca de 6.000 camas de cuidados intensivos en nuestro país, entre sanidad pública y privada, un número que se ha multiplicado con los hospitales de campaña.
Un equipo de Antena 3 Noticias ha podido comprobar cómo se trabaja en las UCI. Todo empieza en la puerta de urgencias, donde un sanitario nos explica que a todos los pacientes "se les hace una primera historia clínica y una placa de tórax, y se les hace la prueba de la Prueba de diagnóstico del coronavirus (PCR)".
Si el paciente da positivo en COVID-19 pero no está grave puede seguir el tratamiento en casa, pero aislado de su familia. Nicolás Pérez, médico de las urgencias de la Clínica Universidad de Navarra, explica que "hay un nivel segundo de gravedad que sabemos que se va a ir a la planta a ingresar e, incluso, hay un tercer nivel de gravedad en el que podría realmente irse a la UCI".
En este hospital, como en todos los privados del país, también hay enfermos de coronavirus derivados de la sanidad pública. "La capacidad de la UCI se ha multiplicado por cuatro", asegura Jose Moreno, el subdirector Médico de la Clínica Universidad de Navarra.
Ángel Ferrero, responsable de la UCi, ha explicado la importancia de los respiradores en las unidades de cuidados intensivos."Son muy importantes porque la característica de esta enfermedad es que un porcentaje importante de pacientes entran en una insuficiencia respiratoria severa, que sino se asiste con respiradores termina falleciendo", señala.