Publicidad
el investigador y ginecólogo Jan Tesarik
Investigadores españoles estudian cómo curar enfermedades genéticas desde el embrión
La meta de esta investigación es curar enfermedades genéticas desde el embrión con una técnica de modificación del genoma que abre la puerta a que anomalías que causan la fibrosis quística o el síndrome de Down puedan ser eliminadas.
El investigador y ginecólogo Jan Tesarik ha impulsado desde Granada (España) una investigación cuya meta es curar enfermedades genéticas desde el embrión a través de una técnica de modificación del genoma llamada CRISPR-Cas.
Se trata de una herramienta de modificación del ADN que abre la puerta a que las anomalías genéticas que causan la fibrosis quística o el síndrome de Down puedan ser eliminadas o incluso silenciadas.
Tesarik, director de la Clínica MAR&Gen de Granada, ha señalado en una entrevista que las nuevas técnicas permiten ya situar al "embrión como paciente", abriendo con ello una "una nueva era" donde la fecundación in vitro está saliendo del contexto exclusivo de la infertilidad y es usada por personas fértiles pero que podrían transmitir una enfermedad hereditaria a sus descendientes. Este riesgo se incrementa notablemente para las mujeres con 40 años o más y, para evitarlo, se realizan diagnósticos genéticos de los embriones antes de ser implantados en el útero materno.
Tesarik, que consiguió el primer bebé por fecundación in vitro clásica en la República Checa en 1982, pretende ir un paso más allá con su investigación y se muestra convencido de que en tres o cinco años estarán operativas las técnicas que permitan tratar con seguridad estos embriones con anomalías genéticas, bien corrigiéndolas o bien silenciando el gen que desencadena la enfermedad.
Su investigación gira en torno al conocido como "corta y pega genético", inspirado en el CRISPR-Cas, un sistema inmunitario de las bacterias para eliminar virus con el que no cuenta el ser humano.
Los científicos han descubierto que pueden aprovechar este sistema existente en la naturaleza para cortar secuencias de ADN y modificarlas; si bien tiene el "peligro" de que puede actuar de manera "indiscriminada", por lo que se buscan fórmulas para hacerlo más selectivo y lograr los efectos deseados.
Este investigador relata que el tratamiento de estos embriones en laboratorio abre todo un abanico de posibilidades científicas, permitiendo descubrir los conceptos aplicables en un futuro a fetos que ya padezcan estas enfermedades y posteriormente, incluso, a niños que hayan nacido con ellas y a los que se pueda mejorar su calidad de vida.
Publicidad