Investigadores gallegos pueden detectar a través de la voz si una persona puede tener deterioro cognitivo

A veces da miedo pensar que la tecnología puede escucharnos a través de nuestro teléfono o smartwatch e incluso procesar lo que decimos, detectando emociones en nosotros. Pero si esta posibilidad se usa para algo positivo, la tecnología está de nuestro lado. En el AtlanTTic de la Universidad de Vigo nos demuestran que esta nos puede ayudar en nuestra salud.

En este Centro de Investigación en Tecnologías de Telecomunicaciones (el AtlanTTic) se está llevando a cabo un macroproyecto europeo llamado DistriMuSe, donde investigan sobre sensores que pueden monitorizar la vida diaria de las personas para estudiar su salud.

Los de Vigo tienen ahora entre manos el monitoreo de la voz de las personas para poder procesar los datos que esta ofrece mediante algoritmos y, con ellos, ayudar a la detención de las patologías de salud mental. “Permite la detención temprana”, explica Carmen García Mateo, catedrática de la UVigo e investigadora en el proyecto. “Como se suele decir, un grano no hace un granero, pero ayuda al compañero”, sigue entre risas la investigadora. “Usamos la voz como un biomarcador que ayuda a detectar el problema porque lanza alarmas”, explica, “de modo que se usaría como triaje, ya que después se analizaría con otros instrumentos para llegar a la enfermedad que haya”. Aclara: “No es una herramienta de diagnóstico, sino de triaje”.

La voz transmite más de lo que pensamos

Para analizar toda la información que ofrece una persona al hablar, los investigadores tienen en cuenta dos parámetros. “Está la parte acústica, que ofrece mucha información sobre cómo se mueve la boca, las cuerdas vocales y aquí se pueden ver cosas”, explica la catedrática. “Después está la parte del contenido”, importante a la hora de detectar el deterioro cognitivo, ya que aquí se pueden observar repeticiones al hablar, el uso de un vocabulario más corto, problemas de memoria y demás parámetros.

Un grupo de investigación de referencia

El de la UVigo es un grupo de referencia trabajando con la voz y con la detección del estado neurodegenerativo a través de esta. “Es prioritario a nivel europeo”, expone Carmen, “ya que se busca el envejecimiento saludable”. “Intentaremos trabajar con esto en residencias y atención primaria”, sigue.

De hecho, a nivel europeo están empezando a aparecer startups que salen del mundo de la investigación y buscan comercialización. “Hace falta más investigación para todo esto”, sentencia la catedrática.

Lo ideal, según Carmen, sería que estas mediciones de voz se realizasen en residencias, house living de personas mayores y que incluso estén instaladas en un reloj personal. “Ahora las casas tienen sensores para muchas cosas, podrían tenerlos para esto”, sigue, “un reloj personal podría realizar un test cognitivo de vez en cuando a la persona que lo porta, registrar los datos y, si fuese necesario, hacer saltar la alarma”. De este modo, se reportarían este tipo de datos al servicio de atención primaria pertinente, agilizando los procesos de diagnóstico en este tipo de síndromes más complicados de encontrar.

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