El Día Internacional de la Enfermería se celebra con un minuto de silencio y una demanda: faltan profesionales

El 12 de mayo se celebra el Día Internacional de la Enfermería y este año se ha recordado a los profesionales fallecidos por la COVID-19 tras un año de pandemia. En total han perdido la vida 257 sanitarios, de los que 12 eran enfermeros o enfermeras.

En diferentes hospitales de España se ha guardado un minuto de silencio para recordarles en el Día Internacional de la Enfermería de 2021. Mientras que en Canarias un grupo de sanitarios sostenía rosas y carteles, en Sevilla ellos mismos han pintado un mural para hacer tributo a sus compañeros y compañeras. En el Wizink Center de Madrid ha habido un concierto con violines.

Algunos de los entrevistados por el Día Internacional de la Enfermería de 2021 han destacado que ha sido “un año muy triste y muy duro” y el cansancio “sobre todo emocional”. En el último año el 43% se ha planteado dejar su trabajo, según el sindicato de la profesión Satse, por cómo el coronavirus ha afectado en su vida personal y profesional. Además, 1 de cada 3 necesita ayuda psicológica y 8 de cada 10 sufre ansiedad. "Esto es estar sometido a un estrés continuo", ha afirmado una de las enfermeras preguntadas, mientras otra especifica "mañana (trabajaremos) otras 12 horas". Antes de que empezara la pandemia ya se denuncia que las plantillas "están mermadas".

La precariedad laboral a la que se enfrentan enfermeros y enfermeras en España

En España faltan 110.000 profesionales de enfermería, muchos se marchan a otros países para buscar condiciones laborales mejores de las que encuentran aquí. Actualmente, hay en Reino Unido 4.473 enfermeros y enfermeras españoles, 1.098 en Portugal y 470 en Bélgica.

Joan Pons relata en una entrevista cómo un día recogió sus cosas y se fue a trabajar a Reino Unido como enfermero. Después de haber conseguido un sueldo fijo trabajando en una pizzería dejó España y se marchó al país anglosajón, donde encontró contrato fijo y 42 días de vacaciones al año. Dice que estaba "harto de la inestabilidad".

Lara Paya, desde Londres, explica que se debe a la "situación precaria y la falta de oportunidades". Jesús Correderas explica que el entorno laboral de esta profesión en España como "más caótico, los contratos van y vienen". Alejandra Moya, enfermera en Noruega, detalla que su salario es más alto de lo que lo sería si trabajase aquí, se encuentra entre los 3.000 euros netos al mes y desde el mismo país nórdico Cristina Martínez asegura "tenemos una formación brillante".

Raisa Luna ha trabajo en el mismo país que Joan durante cinco años y al volver aquí se encontró de nuevo con el muro de la precariedad. Luna ha explicado que le hacen un contrato de un día para no pagarle un fin de semana y que ha encadenado contratos por toda España porque, especifica que "si no, te ves penalizada entre 12 y 18 meses".

Así será la Ley ELA, que ayudará a más de 4.000 enfermos y sus familias