En Suecia, una madre dio a luz hace nueve meses a su hijo, gracias a un útero trasplantado. Debido al cáncer que padeció cuando tenía 20 años, le extirparon su útero, por lo que su madre, también abuela del bebé, le donó el suyo.
La mujer, que pensó que nunca llegaría a ser madre, finalmente lo ha conseguido gracias a un equipo de médicos de Gotemburgo, que ha hecho posible que tres generaciones estén unidas por el mismo vientre.
Este avance único en la medicina supone una esperanza para muchas mujeres que han sufrido problemas y no pueden tener descendencia.