El Ministerio de Sanidad ha facilitado los informes de todas las CCAA en las que desglosa los criterios y el análisis de cada comunidad a la hora de solicitar el cambio de fase en la desescalada del coronavirus.
Dichos informes son la base sobre la que se ha basado el departamento dirigido por Salvador Illa para justificar o denegar el avance de fase de los diferentes territorios.
Madrid y las dos negativas a cambiar a fase 1
Uno de los territorios donde más polémica se ha producido con esas decisiones ha sido la Comunidad de Madrid, a la que se le negó en dos ocasiones el paso a la fase 1 de la desesclada del coronavirus.
En el primer informe emitido para denegar el paso a la fase 1 el 8 de mayo se argumenta que en en el informe presentado por la consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid faltan, a juicio de Sanidad, "detalles esenciales del circuito de indentificación y confirmación de casos en Atención Primaria".
Además, Sanidad recomienda a la Comunidad de Madrid "ampliar la capacidad de realización de PCR, ya que podría resultar insuficiente en caso de rebrote. Lo que si elogia el departamento dirigido por Salvador Illa es el esfuerzo realizado por Madrid para “incrementar sus servicios asistenciales" durante la epidemia por coronavirus.
El segundo informe de Sanidad, fechado a 15 de mayo y el único que no está firmado de puño y letra por Pilar Aparicio Azcárraga , directora general de Salud PÚBLICA, vuelve a denegar el paso de Madrid a la fase 1, argumentado que es necesario consolidar el sistema de detección precoz y seguimiento de casos en Atención Primaria.
Hay que recordar que tras esta segunda negativa, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, presentó una denuncia ante el Tribunal Supremo por la decisión de Sanidad, asegurando que ésta no obedecía a criterios técnicos aplicados de forma homogénea en toda España.
El informe sobre Andalucía, con especial referencia a Málaga y Granada
Otro de los casos que suscitó polémica fue el de las provincias de Málaga y Granada, las únicas de toda Andalucía a las que Sanidad denegó el pasado viernes el paso a la fase 2. Sanidad argumentó su decisión porque estas dos provincias "continúan con una tasa de incidencia elevada en los últimos 14 días".
Barcelona, a fase 1 pese a algunas carencias y un baile de datos
Respecto a Cataluña, Sanidad decidió permitir que Barcelona y su área metropolitana pasaran a la fase 1 de la desescalada en su informe fechado a 22 de mayo, pese a que señala que "no se dispone de la mayoría de indicadores para evaluar el diagnóstico temprano, salvo el tiempo de consulta hasta la confirmación diagnóstica, que es de 1 día".
El País Vasco fue otra de las CCAA que accedieron a la fase 1 de la desescalada el pasado 11 de mayo, después de que el informe de Sanidad destacara la capacidad que tenía este territorio para incrementar en 1.867 el número de camas en hospitales en un plazo de 1 a 5 días y asegurar que era de las comunidades que más pruebas PCR hace por 1.000 habitantes, solo superada por La Rioja.