Lo que dice la OMS es que se tendría que comer 50 gramos diarios de este tipo de procesados para tener un 18% de posibilidades de desarrollar un cáncer de colon. Este tipo de alertas saltan de vez en cuando y muchas quedan en nada.
La sociedad española de endocrinología y nutrición lanza hoy un mensaje digestivo: Lo de ayer no cambia nada. No hay alimentos prohibidos pero dentro de una dieta equilibrada.
Hace dos años la autoridad europea de seguridad alimentaria alertaba de que las patatas fritas o galletas llevaban acrilamida, una sustancia que se formaba durante el proceso de fritura y se relacionó con el desarrollo de cánceres.
Otros estudios, no de la OMS, recomendaban comer sólo un huevo a la semana porque aumentaba el colesterol y se demostró después que no pasaba nada por comer más. El café ha estado siempre entre las alarmas y después de muchas contraindicaciones, ahora se ha descubierto que también es bueno para el sistema cardiovascular.
Sólo hay una cuestión en la que todos los informes coinciden. Una dieta equilibrada, comer de todo un poco es lo más saludable. Todavía estamos digiriendo la alarma de la OMS que choca de lleno con nuestros hábitos de consumo. Comemos más carne roja y procesada de la que debemos.
El empacho informativo del día después afecta también a Inglaterra y al alimento estrella del desayuno británico. En Italia sienten acidez por su consumo habitual de prosciutto. Y en Alemania, indigestión de salchichas.
Todos son productos con valor nutricional pero se abusa de ellos. La Organización Mundial de la salud relaciona directamente este abuso con el cáncer colorrectal y sitúa a alimentos como el chorizo o el bacon en el mismo nivel que el tabaco, el amianto o la contaminación ambiental.
"El problema del informe de la OMS que es cierto y que está bilogógicamente fundamentado, pero generealiza algo que no se puede generalizar", comenta Rogelio González, componente del centro de Investigación del Cáncer.
Algunos expertos también diferencian entre los considerados productos procesados. No es lo mismo comer jamón serrano, que bacon. El mensaje institucional invita a desactivar las alarmas. "Todas aquellas personas que mantienen una dieta equilibrada, que realizan actividad física y que tienen unos hábitos saludables, pueden perfectamente comer de todo", añade el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso.
Y desde Bruselas el prortavoz de la Comisión Europea en asuntos de salud alimentaria dice que está garantizado que todos los alimentos respetan los estándares más estrictos de seguridad alimentaria.