El coronavirus avanza y cada vez hay más mutaciones del virus. La cepa británica está presente en 25 países europeos, según ha informado Hans Kluge, director regional para Europa de la OMS, y en 50 países de todo el mundo.
Investigadores estadounidenses han detectado dos nuevas variantes del coronavirus que podrían ser más contagiosas y que se comportan de manera similar a la cepa británica que se ha extendido en Reino Unido, según conclusiones de un estudio preliminar publicado este miércoles.
Los expertos están detectando nuevas cepas del coronavirus diferentes a las de Reino Unido y Sudáfrica. Las nuevas mutaciones están en Japón y Estados Unidos.
En Estados Unidos, una de las variantes ha mutado de manera similar a la cepa británica, mientras que la otra es una mutación no vista hasta la fecha por los investigadores y que se ha convertido en la cepa dominante de Columbus, en apenas pocas semanas.
"La cepa de Columbus tiene la base genética de casos similares que hemos estudiado, pero presenta tres mutaciones que significarían una evolución muy importante", indicó el profesor de patología de la Universidad de Ohio State Dan Jones, participante en el estudio.
Según Jones, la nueva variante ha aumentado notablemente su poder de transmisión y considera que se tienen que aplicar medidas más duras, porque restringir los desplazamiento no va a ser suficientes para frenar la expansión.
Las dos variantes que se han encontrando en el país estadounidense han sido originadas allí, no importadas desde otros lugares.
La comunidad científica aún no ha revisado esta investigación, pero todo apunta a que el coronavirus está experimentando cambios en su secuencia genética.
La otra variante del virus que surgió en Sudáfrica también se está expandiendo y está presente en 20 países.
Variante británica en Europa
Las autoridades sanitarias españolas aseguran que la cepa británica solo está presente en un centenar de casos activos. Pero en Bruselas preocupa el impacto de esta nueva variante, que se expande a gran velocidad.
La Comisión Europea ha dicho que es el momento de actuar ahora antes de que sea demasiado tarde. Está pidiendo a los gobiernos miembros que prioricen la detección de la variante británica porque sino, se espera que en Semana Santa la tasa de incidencia acumulada se podría multiplicar por diez.
Kluge recordó que el coronavirus, al igual que todos los virus, "cambia con el tiempo", y aseguró que comprendía "perfectamente" la alarma que generan las posibles consecuencias. Por esta razón indicó, que los países deben dedicar más esfuerzos a la secuenciación genética de este virus e incrementar el intercambio de información.
Oleg, Benesh, experto del departamento inmunológico de la oficina europea de la agencia sanitaria de la ONU, señaló que aunque "surgen dudas legítimas" sobre la eficacia de las vacunas contra las nuevas cepas, "no hay pruebas de que la inmunidad adquirida no proteja contra las nuevas variantes del virus".