El 52,6% de mujeres se encargan más de los preparativos navideños que los hombres, según el CIS

Durante las fechas navideñas, es muy habitual que las casas estén siempre llenas debido a las reuniones familiares que los días señalados requieren. Por este motivo, las compras son abundantes y hay que pensar mucho en la logística.

Llevar a cabo recados durante estas fiestas agobia a la mitad de los españoles, pero es cierto que a ellas más que a ellos. Una de ellas es la preparación de las comidas y las cenas, que preocupa al 52,6% de las mujeres frente al 37,5% de los hombres. Pero hay muchas más.

A la hora de comprar y regalar, las españolas lo hacen más que ellos. Así como acudir a celebraciones, actos religiosos, ayudar a otros o decorar belenes y árboles. Para ellos, su tiempo va más hacia el ocio, el quedar con los amigos o viajar.

Frente a estos datos que se reflejan en el CIS, los colectivos feministas remarcan que durante la época navideña las "tareas domésticas" aumentan y se acentúa "el rol de género" de las mujeres como "trabajadoras del hogar". Aunque el cambio generacional avanza y muchas mujeres en estas fechas se plantan y piden un relevo, son pocos quienes ocupan su lugar.

Cada familia con su plato

Con motivo de la subida de los precios, el poco tiempo para dedicar a cocinar o los gustos de cada uno, hay familias que se organizan para repartirse entre ellos las 'tareas navideñas'. Si bien unos llevan el marisco, otros las uvas y así sucesivamente. Es otra de las maneras que se están llevando a cabo en estos últimos años para tratar de paliar la subida de precios.

La abuela que cobra a su familia para cenar en Navidad

Hace un año, Caroline Duddridge, una vecina de Cardiff, se volvió noticia por tomar una decisión radical. A sus 63 años decidió empezar a cobrar a sus hijos y nietos en el caso de que quisieran estar presentes en la cena de Nochebuena.

Su decisión no fue aprobada por muchos. Incluso fue calificada en las redes sociales como la personificación del Grinch de Navidad, pero poco a poco muchos otros se fueron sumando a su postura.

Duddridge explicó que cobraba a sus hijos según los ingresos que tuviesen y a sus nietos por la edad. De esta manera, la anciana buscaba un reparto "justo y equitativo", explicó a los medios de comunicación ingleses.

Tras quedarse viuda, los gastos navideños cada vez se le hacían más cuesta arriba, por lo que decidió buscar una solución. "Al principio hubo algunas quejas de mis hijos, pero el plan de pago se ha convertido en una rutina navideña", contó. Desde entonces, antes del 1 de diciembre debe haber recibido todo el dinero para poder empezar a comprar. A cambio, ella les deja elegir el menú que tendrán sobre la mesa.

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