Incendio de Murcia
Los abogados de las discotecas de Murcia aseguran que el Ayuntamiento conocía que los locales seguían abiertos
Los locales de ocio aseguran que tenían las licencias en vigor y que eran dos locales diferentes.
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Las diferentes versiones procedentes tanto del ayuntamiento de Murcia como de las discotecas Teatre y la fonda Milagros son muy contradictorias entre sí, ya que por una parte, los locales de ocio aseguran que tenían la licencia en vigor y que eran dos establecimientos diferentes.
El abogado de la Fonda Milagros, Francisco Adán, ha explicado a los medios que las licencias se encontraban en el Ayuntamiento y que este habrá tenido que entregarles el juzgado de instrucción número 7.
Algunas habían superado una inspección sanitaria
El Ayuntamiento de Murcia es responsable de conceder las licencias. Por lo que ahora tendrá que aclarar por qué las discotecas están abiertas a pesar de no tener permiso. También se ha conocido que una de ellas había superado este mismo año una inspección sanitaria.
Desde el Ayuntamiento de Murcia niegan que se haya realizado ninguna inspección sanitaria a las discotecas este mismo año. La vicealcaldesa de Murcia, Rebeca Pérez, ha declarado que en el expediente administrativo, no obra ninguna información acerca de un informe sanitario.
Desde las fuentes del Ayuntamiento siguen asegurando que no existía ninguna licencia y se reafirma en su versión de que tenían una orden de cese del año 2022, cuando desde los locales de ocio solicitaron una separación de los locales y se revocó el permiso de la actividad.
Las versiones se contradicen
Todas las versiones se contradicen entre sí, por su parte, la vicealcaldesa de Murcia, segura que desde hace muchos años, hay una sede electrónica del Ayuntamiento de Murcia, y que la única licencia que hay es de 2008, y la cual se corresponde con la solicitud de modificación para poder fraccionar en dos ambos locales; en su resolución, el Ayuntamiento de Murcia deniega esta petición y decae la licencia de actividad.
Sin embargo, lo que no se entiende es que pasado un año de este decreto, las discotecas seguían su actividad diariamente sin ningún tipo de trabajo. Desde la Fonda Milagros aseguran que nunca habían recibido este cese de actividad y basaban sus argumentos en que el Ayuntamiento conocía que se seguían desarrollando actividades en el interior del local y aún así no los precintaron.
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