Pozos ilegales

Los agentes de la Guardia Civil investiga unos pozos ilegales en una comunidad de vecinos en Villanueva de la Cañada en Madrid

Los agentes encontraron varios sondeos manipulados e irregulares en una comunidad de vecinos. El agua extraída de manera irregular sería de unos 85.000 metros cúbicos, equivalente al llenado de 34 piscinas olímpicas por año.

Los agentes de la Guardia Civil investiga unos pozos ilegales en una comunidad de vecinos en Villanueva de la Cañada en Madrid

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La investigación arranca durante una inspección en la comunidad de vecinos de Villanueva de la Cañada. Allí los agentes encuentran varios sondeos ( perforaciones que se realizan en el suelo para alcanzar el nivel del agua subterránea y así poder extraerla con una bomba) que estaban manipulados. Uno de los pozos que si que estaba autorizado lo habían modificado con un sistema de recirculación del agua. Y otro no declarado del que extraían agua sin control, y que los vecinos venían aprovechándose al menos desde hace 18 años.

El coste

Los agentes del Seprona emitieron un informe técnico y valoraron que el fraude llegaba a ser de más de un millón y medio de euros. Se trataría de un presunto delito de estafa cometido por la comunidad de vecinos, al exceder los metros cúbicos extraídos, fraude que llegaba a los 160.000 euros anuales. Durante la investigación, la Guardia Civil confirmó que el agua sacada de manera irregular equivaldría al llenado de 34 piscinas olímpicas cada año.

El daño medio ambiental se valora en más de 1.5 millones de euros y el coste de defraudar a la Confederación Hidrográfica del Tajo en 2,7 millones de euros.

La misión del SEPRONA es velar por el cumplimiento de las disposiciones que tiendan a la conservación de la naturaleza y del medio ambiente, de los espacios protegidos, de los recursos hídricos, y cualquier otra relacionada con la naturaleza. Estas inspecciones se realizan con carácter preventivo. y durante las investigaciones buscan infraestructuras preparadas para sacar el agua de manera ilegal. Estas prácticas suponen una disminución de los recursos hídricos ya sean superficiales o subterráneos.

Otras operaciones del Seprona

De hecho esta unidad de la Guardia Civil está constantemente detectando este tipo de fraudes. Hace apenas dos meses el Seprona cerró dos pozos ilegales en el entorno de Doñana. Los pozos, situados en Lucena del Puerto, Huelva, se utilizaban para regar seis hectáreas de frutos rojos a través de un sistema de goteo. Lo tenían todo preparado para que el agua se almacenara en una balsa y soltarla poco a poco. A pesar de que ya habían sido precintados para proteger los recursos hídricos seguían funcionando con total normalidad. Por lo que se ha procedido a su sellado con hormigón, uno de ellos tenía una profundidad de 11 metros y 2,5 metros de diámetro y el otro 3 metros de diámetro por 10 metros de profundidad.

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