Navarra y Aragón han decretado el nivel uno de alerta por la crecida del Ebro y sus afluentes. La inundaciones han obligado a cerrar el tráfico en varias carreteras y a lo largo del día se han reforzado diques en muchas riberas y poblaciones.
Así, Emergencias insta a los ciudadanos a mantenerse informados en todo momento sobre la evolución de los cambios meteoológicos y de la situación, así como atender las normas de prevención de las comunidades autónomas y seguir las recomendaciones de las autoridades.
El pico de la riada del Arga ha pasado por la localidad navarra de Funes, donde el agua ha inundado un paseo, campos de cultivo, bajeras y naves agrícolas, aunque no ha alcanzado al casco urbano y no se han registrado grandes daños. El nivel del agua ha crecido de forma importante y ha inundado el Paseo del Arga, varias bajeras, naves agrícolas y campos de cultivo.
Por otro lado, el desbordamiento del río Ebro ha provocado el corte al tráfico de la AP-15 en la salida a Valtierra sentido sur, en el kilómetro 13.
El Urumea, desbordado a su paso por San Sebastián
Las fuertes lluvias que han caído en Gipuzkoa han desbordado el Urumea y han causado importantes problemas en los barrios donostiarras acostumbrados a sufrir las crecidas del río -Martutene y Txomin-Enea-, donde se podría volver a complicar la situación si, como se prevé, las precipitaciones arrecian.
La situación en el río Urumea se ha estabilizado esta tarde, aunque el Ayuntamiento de San Sebastián mantiene todos los dispositivos de emergencia activados porque se prevén fuertes chubascos para las próximas horas.
La mesa de crisis del consistorio donostiarra se ha reunido tras una jornada en la que los barrios de Martutene y Txomin-Enea han llegado a la "situación de evacuación", que persistía en el primero a las seis y media de la tarde.
La alerta sigue el viernes
De acuerdo con las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Protección Civil avisa de que las precipitaciones y la subida relativa de las temperaturas, mantienen la alerta por procesos de deshielos en los sistemas montañosos del norte peninsular, que serán más acentuados en el Pirineo occidental, este de la cordillera Cantábrica y norte del Sistema Ibérico.
Por ello, advierte de que esto ocasionará un aumento significativo en el caudal de los ríos, con riesgo de desbordamientos, especialmente, en las cuencas del Ebro, cantábrico oriental y las cuencas internas del País Vasco. En cuanto a los vientos, se prevén vientos fuertes en zonas del nordeste peninsular y el archipiélago canario, con rachas que este jueves podrán alcanzar 90 kilómetros por hora en zonas de Tarragona y Castellón. Vientos que podrán alcanzar 120 kilómetros por hora en zonas de Cataluña, Aragón y Comunidad Valenciana. Con menor intensidad, se verá afectado el archipiélago Balear.
Sobre los aludes, destaca que ante la "extraordinaria acumulación de nieve y la progresiva inestabilidad de los taludes", se mantiene la previsión de aludes en el Pirineo. Así, pide extremar las precauciones, especialmente, a la hora de practicar deportes de montaña.