Ana Sandamil, en el juicio visto para sentencia por el asesinato de su hija Desirée: "No sé cómo pasó lo que pasó. Era la niña de mis ojos"

Ana Sandamil está acusada por el asesinato de su hija Desirée Leal en mayo de 2019 en Muimenta (Lugo) . Hace unos días, los sanitarios afirmaron que "tenía consciencia plena" la mañana siguiente tras matar a su hija de siete años mientras dormían juntas. Este lunes tiene lugar la defensa de las conclusiones de todas las partes del juicio.

Este lunes, el juicio por la muerte de Desirée Leal ha quedado visto para sentencia. La madre ha concluido su intervención en la Audiencia Provincial de Lugo declarando: "No sé cómo pasó lo que pasó. Era la niña de mis ojos". La mujer ha afirmado que solo quería que su hija fuese "feliz". Independientemente de con quién, del cómo y dónde.

"Yo quería a mi hija", "para mí lo era todo", "jamás le haría daño", "no recuerdo lo que pasó esa noche", "Desi es lo mejor que me pasó", "nuestra relación era muy estrecha", declaraba la acusada.

Ana Sandamil, vista para sentencia

La acusación particular contra Ana Sandamil la ejerce el padre de Desirée Leal y expareja de la acusada. La pequeña de siete años fue hallada en la habitación donde durmió junto a su madre. Presentaba varias señales de haber sido forzada para ingerir un líquido donde habría disuelto un fármaco llamado Trazadona. Los resultados de la autopsia indicaron señales de asfixia mecánica.

La acusación particular, pública u popular piden prisión permanente revisable para Ana Sandamil. La defensa de la madre la presenta como una enferma mental y su absolución. "No se trata de ensañarse con Ana. Ana ya ha sufrido bastante. Tiene una enfermedad de por vida, no tiene a su hija y ahora sabe que ella causó la muerte de su hija", la defensa alega que tiene un trastorno de personalidad múltiple.

"Jamás actuaría así en mis plenas facultades. No soy así. No le hago daño a la gente. La quería con toda mi fuerza", exclamaba la acusada en la sala ante el jurado popular.

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