"En los altercados hay algo que se nos escapa", esta es la sensación que ha transmitido el vicealcalde burgalés, Ángel Ibáñez, en una entrevista en Espejo Público. Tras cuatro días de protestas en las calles y con la obra del bulevar paralizada desde el consistorio se ha querido dar información sobre el proyecto "que se está omitiendo".
El vicealcalde ha explicado que la empresa ha presentado un escrito en el que pone de manifiesto que "no quiere volver a la zona hasta que no se garantice su seguridad", por ello desde el consistorio se ha pedido "ayuda para proteger la obra".
Ibáñez se ha quejado de que en los últimos días se han vertido informaciones falsas o de que se han eludido datos. Así pues, ha presentado el proyecto explicando que viene de dos años y medio de trabajos y reuniones.
El vicealcalde ha informado de que anteriormente se creó una plataforma vecinal que llevó a cabo acciones pacíficas de protesta "completamente legítimas", y que fue precisamente cuando estos actos empezaron a perder el apoyo ciudadano cuando "surgen los actos violentos". Para el vicealcalde, "es vergonzoso dar la imagen que estamos dando de Burgos" y añade "es una ciudad amable y segura".
Además ha aclarado que "se está hablando de un promotor que no tiene nada que ver con los adjudicatarios de la obra" en referencia a los rumores que apuntan a Méndez Pozo como interesado en el proyecto. Ibáñez ha destacado que se critican las 250 plazas de aparcamiento subterráneo de pago que a su juicio son "necesarias", pero reprocha que no se dice que se va a crear una bolsa de "600 plazas gratuitas". Además insiste en que "en ese barrio acabamos de inaugurar una nueva guardería, un centro cívico dentro de esta legislatura y hemos remodelado un polideportivo". Por ello considera que "esto va más allá del proyecto".
