Arranca la Operación Paso del Estrecho tras dos veranos de suspensión

Cada verano se produce una gran afluencia de ciudadanos de origen magrebí residentes en España y otros puntos de Europa que regresan a casa para visitar a familiares y amigos. Un viaje que muchos realizan a través de los puertos de Tarifa y Algeciras. Para gestionar este tránsito de personas se creó en 1986 la llamada Operación Paso del Estrecho. Se trata de un dispositivo especial coordinado por el Ministerio del Interior, y en el que participan también muchos otros departamentos. El objetivo es mantener la fluidez y la seguridad, así como la protección de la salud pública.

Sin embargo, la llegada de la pandemia en 2020 provocó la suspensión del operativo. El 12 de marzo se cerraron las fronteras entre ambos países y, posteriormente, la crisis diplomática retrasó su reapertura hasta un total de 26 meses. El pasado mes, el paso de personas finalmente volvía a la normalidad. Los gobiernos español y marroquí han trabajado desde entonces “estrechamente”, según fuentes del Ministerio, para preparar este dispositivo, con reuniones bilaterales de los equipos técnicos.

En este regreso de la Operación Paso del Estrecho van a participar un total de 22.000 profesionales, de los cuales 16.000 son agentes de Policía Nacional y Guardia Civil. Están implicados también funcionarios tanto de Transportes como de Sanidad, organizaciones como Cruz Roja, etc. Se va a poner el foco, especialmente, en los controles sanitarios de Covid-19. Además, Tráfico ha preparado dos áreas de descanso, así como varios puntos de información para los viajeros.

La mayor afluencia se espera para los primeros días de julio (previos a la Fiesta del Cordero) y para finales de ese mismo mes, así como la primera y última semana de agosto. El operativo concluirá el 15 de septiembre.

Los últimos datos, correspondientes a 2019, dejan pocas dudas del numeroso trasiego de viajeros que se produce en estas fechas: fueron 3’3 millones de personas y 780.000 vehículos los que se desplazaron al norte de África.

España trabaja en una guía con recomendaciones para la población ante una guerra