Agresión

Asalta un prostíbulo, amenaza a varias mujeres y agrede a guardias civiles tras robar el coche de su pareja

El hombre, de 28 años y vecino de Cabana de Bergantiños, en A Coruña, había sido detenido en 2021 por un presunto delito de violencia de género.

Club en el que se produjo el altercado el 24 de junio

Club en el que se produjo el altercado el 24 de junioAntena 3 Galicia

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Robo, amenazas, agresión sexual y atentado a la autoridad son solo algunos de los hasta ocho delitos por los que está siendo investigado un vecino de la parroquia de Nantón, en el ayuntamiento de Cabana de Bergantiños (A Coruña). Todo ello, después de protagonizar el pasado 24 de junio un grave altercado en un club de alterne en Arteixo.

Según el atestado, tras haberle robado el coche a su novia, el individuo se dirigió al local entorno a las 22:00 horas, llevando consigo dos bolsas de cocaínay más de 1.000 euros –robados también a su pareja–. Al darse cuenta de las substracciones, la mujer decidió acudir al cuartel de Carballo para denunciar lo sucedido.

Al mismo tiempo, a 15 kilómetros de distancia de ese cuartel, el hombre accedía al club Mont Blanc. Fueron las propias mujeres las que se percataron de la agresividad del individuo, que las agarró e incluso les ofreció rayas de cocaína. Ante la negativa de las trabajadoras, empezó a golpear el mobiliario del local.

Fue el encargado el que, finalmente, consiguió expulsar al agresor del local, no sin antes forcejear en el interior. Tras unos minutos dando golpes en la puerta, todo parecía haberse terminado. Pero no fue así.

Amenazó de muerte a una de las mujeres

Los gritos de una mujer alertaban nuevamente a sus compañeras: el hombre había accedido nuevamente al club rompiendo una de las ventanas del piso superior. Una vez dentro, se encerró en uno de los cuartos con otra de las prostitutas. En ese momento, el encargado decidió llamar a la Guardia Civil.

Los agentes intentaron que el hombre soltase a la mujer, a quien usaba de rehén poniéndole un trozo de cristal al cuello. Antes, habría tratado de agredirla sexualmente. Al ver que no cedía, los guardias –que también fueron agredidos e incluso necesitaron asistencia médica– decidieron utilizar la fuerza hasta conseguir esposarlo, con ayuda de otros dos agentes locales.

El investigado está acusado de, al menos, seis delitos graves: robo de vehículo, allanamiento de morada, detención ilegal, intento de agresión sexual, desobediencia y atentado a la autoridad. En total, se trata de infracciones que podrían superar los 15 años de prisión.

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