Incendio en Guillena
La batería de un móvil, la causa del incendio en el que murió la familia en Guillena (Sevilla)
Las llamas se extendieron muy rápido y las rejas impidieron que el matrimonio y sus dos hijos pudieran salir de la casa.
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La localidad de Guillena (Sevilla) está de luto por la muerte de la familia en el incendio de una vivienda. Fue un teléfono móvil lo que provocó el fuego. La batería explotó cuando estaba cargando apoyado en el sofá. Así lo detalla la Guardia Civil. Las llamas se extendieron muy rápido y las rejas impidieron que el matrimonio y sus dos hijos pudieran salir de la casa.
El lunes los efectivos del equipo de la investigación acudieron a la vivienda en la que murió la familia por inhalación de humo. La Inspección Técnico Ocular (ITO) del equipo de incendios concluye que fue la batería del teléfono la que provocó el incendio.
El incendio se desató alrededor de las 8:00 horas del domingo. El 112 recibió una decena de llamadas alertando sobre el fuego y la presencia de personas atrapadas en el interior del inmueble. De inmediato, se activaron los Bomberos de la Diputación de Sevilla, los servicios sanitarios del 061, la Guardia Civil y la Policía Local.
A pesar de los esfuerzos de los equipos de emergencia, no se pudo evitar el trágico desenlace. El Ayuntamiento de Guillena confirmó la muerte de los cuatro integrantes de la familia, incluyendo al hijo menor de 16 años.
El Ayuntamiento de Guillena decretó tres días de luto oficial en esta localidad. Durante estos días, las banderas de edificios municipales ondearán a media asta, e igualmente se suspenden los actos festivos y oficiales que estuvieran previstos.
Es el segundo más grave registrado en viviendas España en 2024, después del que se llevó la vida de diez personas y dejó a una docena heridas en un edificio de catorce plantas en el barrio valenciano de Campanar el pasado 22 de febrero. El suceso es también uno de los tres incendios en viviendas más letales registrados en la provincia de Sevilla en los últimos 20 años.
El peor se produjo el 20 de abril de 2008 en Écija y causó la muerte de seis personas, un matrimonio, sus tres hijos y el novio de una de las hijas. En noviembre de 2014 otras cuatro personas -un niño de 11 años, un joven de 18, y los abuelos de ambos- murieron intoxicados por inhalación de humo tras el incendio de una vivienda en Arahal.
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