Sequía

Begur cobra 20.000 euros en multas a los que se saltan las restricciones por la sequía en Girona

Mano dura contra los que no respetan las restricciones de agua y consumen sin control en Begur (Girona). Las multas van de los 750 a los 3.000 euros. Se están usando contadores inteligentes y patrullas para descubrir a los infractores.

Imagen de archivo de una piscina

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Contadores inteligentes en todas las viviendas del pueblo para controlar el consumo de agua de todos los vecinos. Es una de las soluciones que han encontrado en Begur (Girona) para luchar contra la sequía y ahorrar agua.

Los contadores inteligentes de agua "no engañan a nadie"

Son aparatos que que detectan si alguien se pasa consumiendo agua. Acompañamos a los técnicos de servicio de agua potable para que nos expliquen cómo funcionan. Queralt Mercader, explica que "son contadores mecánicos que tienen un módulo de radiofrecuencia que registra los consumos y que permite monitorizar horariamente el consumo de agua de todos los abonados de Begur". Con ello han detectado que "hay gente que llena piscinas y riega jardines a pesar de las restricciones".

La alcaldesa, Maite Selva, asegura que "nadie puede decir que no ha hecho ese gasto porque los contadores no engañan a nadie".

El riego automático de grandes jardines dispara el gasto

Begur es un pueblo con 5.700 viviendas, la mayoría son segundas residencias y están ubicadas en algunas de las 52 urbanizaciones que conforman el municipio. Según el consistorio, una de cada dos tiene piscina. En una de esas viviendas se ha detectado un "gasto estratosférico" porque "hemos visto consumos de viviendas como si viviesen 200 personas".

Patrullas "a la caza" de infractores

Ya este verano, las patrullas policiales avistaban con prismáticos si algún vecino llenaba la piscina. En total, se han interpuesto 70 multas que ascienden a los 20.000 euros y que van de los 750 a los 3.000 euros. La alcaldesa lamenta que "es una pena que el lenguaje que mejor se entienda sea el de las multas".

Las plantas de entrada al municipio se han cambiado por otras que aguantan mejor la sequía y la presión del agua también se ha reducido para fomentar el ahorro del agua, medidas restrictivas mientras se mira al cielo esperando la lluvia.

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