Javier Ardines, concejal de Izquierda Unida de Llanes, fue asesinado el pasado 16 de agosto, y, tras casi una semana desde que se produjeron las detenciones de los presuntos implicados, ha roto su silencio mediante una carta en la que piden "el máximo respeto" a la memoria de la víctima a la vez que "empatía" hacía el dolor que sufren "para asumir su pérdida en tan trágicas circunstancias".
En la misma misiva, los familiares del edil reconocen y agradecen la "dedicación y profesionalidad" que los agentes de la Guardia Civil encargados del caso han demostrado durante toda la investigación y que han conseguido llegar a las conclusiones adecuadas para detener al autor intelectual del crimen, al intermediario y a los dos autores materiales del mismo.
Tras 188 días de investigación, los familiares de Ardines tienen palabras de agradecimiento también para todas las personas que les han apoyado y dado su cariño en estos "duros momentos".
Sin embargo, en la carta también se hace referencia a los detenidos: "Todas las personas que han participado paguen por el daño que han causado". Asimismo, los autores del escrito, señalan que se reservan el derecho a emprender acciones legales "contra todas aquellas personas y empresas están vertiendo comentarios infundados e injuriosos sobre Javier Ardines y su familia".
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