Los más de 1,9 millones de musulmanes que residen en España comenzarán este jueves 17 de mayo el ayuno del Ramadán, un mes en el que no podrán ingerir alimentos ni bebida, ni fumar, ni mantener relaciones desde el alba hasta la puesta del sol, dedicando un mayor espacio a la oración y a la ayuda a las personas necesitadas.
El Ramadán es uno de los cinco pilares del culto en el Islam, que se practica durante este mes lunar (29/30 días) y tiene un importante significado religioso para los seguidores del Islam ya que fue en este mes en el que comenzó la revelación divina del Corán, a través del ángel Gabriel al profeta Mahoma, quien lo transmitió al resto de la humanidad.
La CIE agradece a toda la sociedad española su "comprensión" ante la práctica del ayuno de sus vecinos musulmanes, e incluso la "ayuda y facilidades" que prestan para su cumplimiento, y "especialmente, a las personas en puestos de decisión".
En este sentido, el presidente de la CIE, Riay Tatary, ha apelado a "las buenas prácticas" por parte de los empresarios, sobre todo, en trabajos que requieren más esfuerzo y horas bajo el sol. "He recibido varias peticiones, especialmente de aquellos que trabajan en invernaderos o en la cosecha de la fresa, ellos aguantan, tienen voluntad, pero pedimos que las jornadas empiecen más temprano y concluyan antes", ha subrayado Tatary.
Según el Acuerdo de Cooperación del Estado con la Comisión Islámica de España, los miembros de las comunidades islámicas pertenecientes a la CIE que lo deseen, podrán solicitar "la conclusión de la jornada laboral una hora antes de la puesta del sol, durante el mes del ayuno".