Cocinas fantasmas

Cientos de vecinos protestan contra 12 cocinas industriales pegadas a un colegio público en el centro de Madrid

Uno de los fenómenos más llamativos de la pandemia ha sido el espectacular aumento de la comida a domicilio. La demanda ha multiplicado la apertura de las conocidas como "cocinas fantasma", que proliferan en locales y pisos. En Madrid, este sábado, centenares de vecinos se han manifestado contra la instalación de 12 cocinas industriales pegadas a un colegio.

Cientos de vecinos protestan contra 12 cocinas industriales pegadas a un colegio público en el centro de Madrid

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Las escena se vuelve a repetir, en este caso en pleno centro de Madrid. Centenares de vecinos han salido a las calles para protestar contra la instalación de 12 cocinas industriales pared con pared con un colegio público en el que estudian más de 900 niños. Aseguran que no tienen nada en contra, pero temen los efectos nocivos de los humos que saldrán de cuatro grandes chimeneas y de un aumento del tráfico en esta zona residencial, estimado en más del 72%.

Como se puede observar en el vídeo de la parte superior de la página, la puerta de acceso al futuro negocio de cocinas fantasma y la pared del patio del colegio no tienen una distancia de más de 15 metros, como marca la ley vigente. "Las chimeneas están a escasos dos metros del patio. La empresa está, con la autorización del ayuntamiento, utilizando el patio como sumidero para los humos y de todos los gases que conllevan", explica uno de los afectados.

Las consecuencias para los afectados

"Habrá un montón de riders y de personas que cuanto más sirven más cobran, por lo que van a ir a toda velocidad y tendrán que rodear forzosamente el colegio por la distribución de las calles", añade otro.

Recurrieron al Ayuntamiento y esta fue la respuesta, según una de las vecinas: "Básicamente su resumen fue que si vivimos en Madrid centro nos tenemos que atener a que nos pase algo así y que si no queremos contaminación, que nos vayamos a un pueblo".

Otra de las consecuencias es que si realmente este negocio realmente termina abriendo y creando este impacto, seguramente para un propietario no será tan fácil vender su piso a un precio justo y se va a devaluar su precio.

La empresa asegura que cumple todos los requisitos de una legislación que el propio Ayuntamiento reconoce desfasada. Mientras tanto, los fogones se encenderán aquí dentro de tres semanas si nadie lo impide.