Publicidad
PARA FAVORECER LA IGUALDAD
Un colegio de Madrid impartirá por primera vez la lengua de signos española como asignatura curricular
A partir del año que viene se convertirá en la primera escuela que imparte esta asignatura, y lo hace aplicando el Real Decreto 126/2014 de 28 de febrero por el cual los centros pueden ofrecer asignaturas relacionadas con el aprendizaje de la lengua de signos.
El Colegio Gaudem se convertirá, a partir del próximo año escolar, en el primer colegio de la Comunidad de Madrid en el que se imparta la lengua de signos española como asignatura curricular para el conjunto del alumnado de Primaria que estudia en este centro, ha informado el colegio en un comunicado.
Una iniciativa que responde a la filosofía del centro de "procurar el acceso y la participación en condiciones de igualdad de todos sus estudiantes". Así lo ha señalado su directora, Natividad Roldán, y que traslada a la práctica educativa lo recogido en el Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, que contempla que las Administraciones educativas, y en su caso los centros, puedan ofrecer asignaturas relacionadas con el aprendizaje de la lengua de signos española y la lengua de signos catalana en esta etapa educativa.
El colegio al completo afirma afrontar este reto con compromiso y responsabilidad. "Nos enorgullece ser una escuela inclusiva, donde nuestros alumnos sordos aprenden junto con sus compañeros oyentes", afirma la directora del Gaudem, un centro al que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte reconoció en 2010 por su labor hacia el alumnado con necesidades educativas especiales.
En este sentido, Roldán ha reconocido que siempre han sido muy conscientes de que "cada alumno tiene características, intereses, capacidades y necesidades distintas, y que deben ser los sistemas educativos los que den respuesta a esta diversidad".
Además, ha señalado que en lo que respecta al alumnado sordo su experiencia educativa les ha permitido constatar que la lengua de signos "no solo favorece su desarrollo integral, sino que contribuye a que estos alumnos accedan al currículo con las mismas oportunidades lingüísticas que el resto de sus compañeros, y facilita su proceso de integración de en situaciones y actividades de la vida cotidiana y escolar".
"A ello se suma", explica la directora, "el hecho de que el porcentaje de alumnos sordos que pasa a la educación secundaria obligatoria, a los ciclos formativos, al bachillerato, e incluso a la Universidad, aumenta gracias a su inclusión en sistemas educativos bilingües de calidad en los que el aprendizaje de la lengua de signos y de la lengua oral van de la mano".
Publicidad