Mossos d'Esquadra
Las comisarías catalanas, a rebosar de marihuana: los Mossos d'Esquadra reclaman ayuda para deshacerse de ella
El SAP-FEPOL, en un comunicado, solicita la intervención de todos los actores sociales, políticos, policiales y judiciales para solucionar un problema que "sobrepasa a los Mossos".
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Son muy llamativas las imágenes que nos llegan procedentes de los Mossos d'Esquadra, en las que podemos ver cantidades enormes de marihuana intervenida y que permanece en varias de sus comisarías. Una situación provocada por la mala gestión de las plantas decomisadas y para la que el Sindicato Autónomo de Policía (SAP-FEPOL) pide soluciones.
En las dependencias policiales de los Mossos en La Ràpita (Tarragona), por ejemplo, hay más de 3.000 plantas de esta droga acumuladas, fruto de las incautaciones derivadas de las investigaciones policiales. Un problema que está afectando a esta y otras muchas comisarías de este cuerpo de seguridad.
Un problema que "sobrepasa a los Mossos"
El SAP-FEPOL asegura que este problema no es de ahora, sino que se ha ido agravando con el tiempo, provocado por "el mal funcionamiento del modelo de gestión de los residuos vegetales y sólidos". En un comunicado, solicitan una "solución definitiva" que sea segura para el bienestar físico de los agentes, así como para el de los ciudadanos, "evitando las quejas del vecindario próximo a las comisarías".
Por otro lado, el organismo ha puesto de relieve que, en su día, ya denunciaron ante el Consejo de la Policía que el hecho de que los agentes deban realizar tareas de "jardineros a tiempo parcial", gestionando un material cuyo transporte hasta la comisaría es logísticamente complicado.
Ahora, reclaman soporte para deshacerse de toda esa droga, ya que es un problema que "sobrepasa al cuerpo de los Mossos d'Esquadra", apuntando que Cataluñaes "el máximo productor de marihuana del sur de Europa o de Europa entera". Por ello, piden la ayuda de todos los cuerpos "sociales, políticos, policiales y judiciales".
En referencia a las imágenes difundidas de la comisaría de La Ràpita, añaden que da una mala imagen a la población. Asimismo, consideran que no es un contexto adecuado para aquellas personas que acuden a las dependencias policiales para denunciar un delito.
Desde el departamento de Interior de la Generalitat de Cataluña, por su parte, recuerdan que, antes de que acabe 2022, se prevé que esté operativo el almacén central de sustancias estupefacientes, pensado, precisamente, para almacenar todas estas sustancias ilegales incautadas en la comunidad catalana.
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