Desde la fundación del magnate textil, Amancio Ortega, aseguran que su objetivo ha sido acelerar los planes de cada Comunidad Autónoma en diagnóstico y tratamiento del cáncer, no interferir. Y así lo entienden muchos profesionales.
Desde que se produjo el anuncio, la fundación se ha reunido con responsables oncólogicos y sanitarios de cada comunidad para definir la equipación más necesaria. Ya se han firmado 18 convenios. Las sumas más cuantiosas han sido para Catalunya, Andalucía y Valencia, sólo falta Madrid.
En su mayoría, el dinero servirá para comprar modernos aceleradores lineales de radioterapia que no destruyen tejidos sanos. Pero también mamógrafos, sistemas de resonancia magnética, ecógrafos digitales y tomógrafos axiales computarizados.
Ortega, que, según consta en su biografía, sufrió un cáncer hace años, habría querido acelerar la llegada de los tratamientos de vanguardia que él mismo recibió.