A partir del próximo 21 de junio, toda España alcanzará la nueva normalidad y dejará atrás el estado de alarma por la crisis del coronavirus. El buen tiempo primaveral que está haciendo en algunas partes del país está animando a muchos a acudir a la playa o a alguna piscina para refrescarse.
Con el paso de los días y con la subida de las temperaturas, la afluencia a estos espacios aumentará pero cabe destacar que su acceso y disfrute será diferente al de otros veranos por el coronavirus. Entonces, ¿cómo será ir a la playa y la piscina en la nueva normalidad?
Playas
Cada ayuntamiento tendrá que regular el aforo, las condiciones de higiene en sus playas y velar porque se mantenga la distancia social en este espacio.
A medida que avanzaba la desescalada, han surgido algunas propuestas como la de dividir en parcelas la arena de la playa que previamente deben ser reservadas a través de una aplicación. También se han formado colas en los accesos de algunas playas para poder acceder a la arena debido al exceso de aforo.
Galicia, la primera comunidad autónoma que entra en la nueva normalidad, ha establecido que debe haber una persona por cada cuatro metros cuadrados. Además, se ha habilitado de nuevo el uso de las duchas.
Piscinas
Tanto las piscinas municipales como las piscinas comunitarias tienen permiso de apertura pero deben de hacerlo con unas estrictas condiciones de higiene y de aforo.
Galicia ha establecido que las piscinas de uso colectivo operarán al 75% y deberán desinfectarse con frecuencia sus espacios comunes, especialmente vestuarios y baños.
