El uso de mascarillas esta ampliamente extendido en la población china por su cultura de protección pero ahora, con la epidemia de coronavirus, el uso de este tipo de protecciones se ha disparado. De hecho, la vocal del Colegio de Farmacéuticos de Madrid ha subrayado que el cliente chino tiene "gran conocimiento" de las características de este producto y de la normativa que regula el nivel de protección de las mascarillas.
A modo genérico que existen las denominadas mascarillas quirúrgicas, que consisten en evitar la transmisión de agentes patógenos o de fluidos por parte del portador, es decir, garantizar que no se da "contagio de dentro afuera". Luego están las denominadas mascarillas de protección que son la que preservan a su portador de agentes patógenos o virus que están en el exterior. Por tanto, se trata de garantizar que no hay contagio "de fuera a dentro".
Este es el modelo de mascarillas que demandan los ciudadanos chinos "y no cualquier modelo", dado que suelen preguntar por el modelo certificado en normativa americana N95
En materia de mascarillas, existe también una normativa europea que pauta tres niveles de protección: FFP1 (78% de protección), FFP2 (92% de protección) y FFP3 (98% de protección). El modelo americano se sitúa en un grado 95 de protección en su filtro de respiración, intermedio entre el nivel 2 y 3 europeo.
Así, en el caso de España, los ciudadanos chinos se decantan sobre todo por el modelo FFP2, pero ante la falta de unidades están demandando cualquier clase de mascarilla. Un ejemplo del aumento de demanda en oficinas de farmacia de Madrid se ha detectado en el entorno del polígono de Cobo Calleja, donde hay gran presencia de negocios regentados por ciudadanos chinos.
En España, aparte de esta demanda de población china, se suelen solicitar mascarillas de protección para casos de pacientes "inmunodeprimidos", por ejemplo, pacientes que han recibido tratamiento contra el cáncer y que se les pauta mayor protección para evitar contraer enfermedades infecciosas, sobre todo de carácter respiratorio. También piden estos productos personas que son alérgicas y, por ejemplo, trabajan en el sector de la limpieza. A su vez, ha destacado que este incremento de demanda se produce también precisamente en época de enfermedades como la gripe o la bronquiolitis.