¿Cómo tratar a enfermos de Alzheimer? La respuesta está en Santiago de Compostela

Son sociólogos, investigadores, neurólogos, trabajadores sociales y neuropsicólogos. Juntos forman un equipo que busca “informar al cuidador y formarle para atender a los suyos”, explica Ana Díaz Cortés, a modo de titular, y quien forma parte de este grupo de apoyo al cuidador del Hospital Clínico De Santiago.

Ofrecen técnicas para personas que tienen a su cargo a familiares o allegados con Alzheimer y otras demencias. Este año han arrancado ya con la planificación de ocho charlas, cada miércoles, sobre prevención del maltrato al mayor, sobre el estigma social de los enfermos, las alteraciones del lenguaje de estos pacientes o el conocimiento de autocuidados.

Evitar el estrés del cuidador

El objetivo es formar para evitar el estrés de quien cuida: “La ansiedad de los cuidadores existe cuando no tienen conocimiento de a lo que se están enfrentando”, comenta Juan Manuel Pías, especialista en deterioro cognitivo.

La importancia de pedir ayuda y de hacer partícipes al resto de familiares es básica para el buen cuidado. Por ello, se implican en las terapias no farmacológicas atendiendo, sobre todo, a las etapas tempranas de la enfermedad. Es por eso que explican cómo llevarlas a cabo para hacerlas en casa y evitar un deterioro.

Consejos para evitar el estigma social del paciente

Otro aspecto relevante es el estigma social del paciente. Muchos familiares terminan por aislar a los enfermos en sus hogares, los retiran de la sociedad, y esto favorece que el deterioro vaya a más. Ellos les explican qué hábitos son importantes para los que cuidan y cómo, día a día, pueden ayudarles a paliar los efectos de la enfermedad.

Pero no solo se puede asistir de un modo presencial a estas charlas educativas, ya que también se ha creado un grupo de WhatsApp para los familiares. Ellos formulan las preguntas o inquietudes y este grupo de expertos les aporta la solución. Casos personalizados con profesionales personalizados. La vida de los enfermos, pero también de quienes los cuidan, puede cambiar.

La televisión en abierto, el medio favorito para informarse para el 68,2% de los ciudadanos